Abogados trabajan como taxistas de Uber y meseros para sobrevivir a los costos de Nueva York
Están agobiados por deudas universitarias y los altos alquileres
Nadie escapa a los precios exorbitante de la ciudad y el estado más caros de EEUU. Ni siquiera los profesionales. Irónicamente, muchos abogados que tratan de ayudar a quienes no tienen dinero, deben buscar un segundo ingreso para poder costear el trabajo que donan y/o cubrir sus deudas universitarias.
Según Jared Trujillo, presidente de la Asociación de Abogados de Ayuda Legal (The Legal Aid Society), al menos un tercio de sus colegas allí a tiempo completo, tienen empleos adicionales las noches o los fines de semana. Y dos tercios deben una deuda de préstamos estudiantiles de al menos $200 mil dólares.
Danielle, por ejemplo, entrega comida para Grubhub y UberEats, y ayuda a personas con sus declaraciones de impuestos. Su colega Julia Boms acude a los tribunales en los días hábiles, y los fines de semana trabaja atendiendo una barra, como en sus tiempos de estudiante.
“Fui a la escuela para hacer esto”, comentó irónicamente la joven de 28 años a The New York Times. A pesar de tener además una maestría en psicología forense, vive en un apartamento compartido con dos personas más en Murray Hill, en Manhattan.
Otros colegas suyos son meseros, pasean perros o conducen autos para Uber.
Según un documento interno, The Legal Aid Society, la organización de servicios legales sin fines de lucro más antigua del país, ofrece a los recién graduados salarios iniciales de $53,582 dólares, que aumentan a $62,730 al aprobar el examen estatal del colegio de abogados.
En contraste, el salario promedio de los abogados de primer año en firmas privadas fue $135 mil dólares en 2017, según la asociación NALP.
Los ejecutivos de The Legal Aid reconocen que los salarios relativamente bajos son un obstáculo para reclutar y retener a abogados fuertes, especialmente en Nueva York.
No buscan competir con los salarios del sector privado. Su objetivo es alcanzar la paridad con los abogados en el Departamento Legal de la ciudad, que paga aproximadamente $108 mil dólares a profesionales con 10 años de experiencia. Los de The Legal Aid con experiencia similar ganan alrededor de $90 mil.
En una audiencia reciente en el Concejo Municipal, funcionarios de The Legal Aid destacaron la disparidad salarial ante los líderes que han propuesto otorgar a las organizaciones de servicios legales financiados por la ciudad $15 millones de dólares adicionales en el presupuesto 2019-20 para ayudar a cerrar la brecha salarial. Los abogados dicen que deberían ser $50 millones de dólares.
“El trabajo es difícil porque estás viendo mucha tristeza, mucho dolor”, dijo Janet Sabel, directora ejecutiva y abogada en The Legal Aid. “Ves a personas que están presas, ves a clientes cuyas casas están cubiertas de moho, simplemente estás viendo cosas muy, muy tristes. Queremos que la gente tenga tiempo libre”.
El tema de la baja remuneración para los defensores públicos ha llamado incluso la atención de la senadora Kamala Harris de California, quien busca la nominación Demócrata para presidente.
Harris dijo el mes pasado que presentaría un proyecto de ley que establecería la paridad salarial entre los defensores públicos y los fiscales de todo el país en un plazo de cinco años.
El alcalde Bill de Blasio, un Demócrata que también se está postulando a la presidencia, no se ha comprometido con el posible aumento a los abogados de The Legal Aid. Un portavoz de la alcaldía, Raúl Contreras, dijo que “las conversaciones con el Concejo sobre este tema están en curso”.
Mientras, en NYC los alquileres de vivienda han alcanzado precios históricos.