Mala campaña por muertes de turistas en República Dominicana se siente en NYC
Algunas agencias de turismo en Washington Heights confirman una reducción en sus reservaciones, mientras políticos dominicanos de Nueva York toman acciones para demostrar que la isla es segura
Recorrer en los últimos días cualquier cuadra de Washington Heights, corazón de la diáspora dominicana en la Gran Manzana, es encontrarse con una comunidad de inmigrantes que tiene opiniones divididas en casi todo, pero cuando apenas se asoma algún comentario sobre las circunstancias de la muerte de 10 turistas estadounidenses en hoteles de la isla, la opinión es casi unánime: se trata de una campaña para afectar la imagen del país.
Algunas alertas, sobre la cancelación de vuelos y paquetes turísticos, especialmente desde Estados Unidos, han sido destacadas en varias oportunidades en medios neoyorquinos en el último mes.
Tal es el caso del informe de ForwardKeys, un portal que monitorea compras de vuelos, el cual expone que las reservas a República Dominicana comparadas en junio, para viajar en julio y agosto, cayeron un 85% en comparación con el mismo período del año pasado. El mismo reporte revela que las reservas se están recuperando lentamente.
Y esa mala reputación que se le está dando a Quisqueya por los reportes de muertes, está teniendo algunas repercusiones negativas entre los dominicanos de la Gran Manaza. De acuerdo con un sondeo realizado por El Diario, aunque en 21 establecimientos de comercialización de paquetes turísticos en Washington Heights el 90% no ha reportado cancelación para la temporada de verano, si se constató un consenso entre los consultados, de que sí existen rumores que podrían afectar ese destino, sino se toman medidas drásticas a tiempo.z
Confirman que se ha infundido temor
En la agencia American WorldWide, ubicada en la calle 181 con la avenida Broadway, su vocera Cecilia Corniel, confirmó que sí se ha reportado una leve caída entre mayo y junio de boletos para la isla, al compararlo con la dinámica comercial de veranos anteriores.
“Nosotros sí hemos observado temor, inclusive de los propios dominicanos. En algunos casos prefieren no llevar a sus niños porque hay muchos comentarios aquí en Estados Unidos sobre la criminalidad, por ejemplo, mi propia cuñada americana, prefirió viajar a Bahamas”, comentó Corniel.
La empresaria turística agregó, que aunque esas cancelaciones no marcan una tendencia importante que afecte las finanzas del negocio, contó que, “yo acabo de regresar de mi maravilloso país, estuve en la Ensenada y no vi tantos turistas extranjeros como en años anteriores”.
Apenas a unas cuadras de esta agencia, en TCN Tour &Travel, la productora turística Katy Torres quien desde 1990 opera en la populosa avenida St. Nicholas, también confirmó que han tenido cancelaciones, asegurando que han sido justificadas por “temor a los hechos que han pasado en la isla, por la muerte de turistas en meses pasados”, comentó.
Torres narró que hace una semana, un grupo de quince turistas que tenían reserva para un paquete a Punta Cana, optaron por no viajar, porque dos americanas en el grupo se sentían inquietas, por las noticias de medios noticiosos aquí.
“Obviamente uno se preocupa, no por el negocio, porque finalmente los clientes cancelan y nos compran para otro destino. Lo que nos duele, es que una publicidad negativa, mal intencionada, pueda hacerle daño al primer destino turístico del Caribe”, explicó.
Pero no todos han sentido efectos negativos. Plácido Rodríguez, gerente de Quisqueya Tour asegura que “los clientes nuestros, que son casi la totalidad dominicanos, no han prestado atención a esas campañas. Hemos vendido igual que todos los años en esta temporada de verano. Pero hay que reconocer que eso sí debe atemorizar a los estadounidenses”.
Muertes aún misteriosas
Las preocupaciones en todas las estructuras del turismo quisqueyano se elevaron cuando la aerolínea Delta publicó un comunicado en el cual anunciaba que se podía “cambiar o cancelar” -sin costo adicional- los vuelos con destino a República Dominicana, “debido a las misteriosas muertes en este país”.
Justamente esa política aplicaba para vuelos desde el 21 de junio hasta el 15 de agosto, en la ruta hacia y desde Punta Cana, la localidad en donde en complejos hoteleros murieron cuatro turistas estadounidenses recientemente, una de ellas Leyla Ann Cox, de 53 años, una residente de Staten Island, en Nueva York.
Según el reporte de Forwardkeys, cuando trascendió la muerte de esta viajera norteamericana, a causa de un infarto, el pasado 10 de junio, la semana posterior se registró la más alta tasa de cancelaciones de vuelos a ese destino.
“Para comprobarte que todo esto genera mucha desinformación, cuando la línea Delta sacó sus reportes, muchos vinieron a buscar pasajes porque se había entendido que estaban regalando viajes, porque nadie quería ir a la Isla”, comentó vía telefónica, Maritza Gómez, gerente de YomaritzaTravel, quien acota que su actividad comercial, “hasta ahora”, no ha experimentado ningún “bajón”, pero insiste en que hay que “ponerle freno a la mala publicidad”.
Cuando el pasado 13 de junio se reveló que Vittorio Caruso, un neoyorquino residente de Long Island era el décimo turista de Estados Unidos muerto, en circunstancias no claras, en un complejo hotelero en la isla, nuevamente la duda sobre la seguridad del destino caribeño, saltó a los titulares y a los noticieros de la Gran Manzana.
El clima de opinión empezó a tomar con fuerza otra dirección. Familiares de Caruso dijeron a medios neoyorquinos que “era una persona saludable, pero se había sentido mal después de tomar y comer en un resort”, como se puede verificar en por lo menos doce reportes de las grandes cadenas de televisión y medios impresos de Nueva York.
Desde ese momento, todos los decesos de los viajeros norteamericanos entre mayo y junio de este año, empezaron a ser vinculados con una aparente intoxicación y la falta de confiabilidad en la calidad del licor, comida, y agua de los hoteles del paraje caribeño.
Este miércoles, otra información publicada en los medios neoyorquinos involucra a otra turista de Staten Island -que prefirió estar en el anonimato- y declaró “haber sido drogada, violada y arrojada desde un segundo piso mientras pasaba sus vacaciones en un resort en la isla”, luego de haber compartido una bebida, reportó la cadena ABC.
Así mismo, hasta este viernes al mediodía, en buscadores como Google, al colocar en la sección de noticias la palabra “Punta Cana”, las primeros 10 informaciones están vinculadas con información negativa, sobre ese complejo hotelero y playero.
Nueva York en la agenda
Las autoridades quisqueyanas reaccionaron para tratar de revertir las informaciones que empezaron a correr como pólvora, especialmente las relacionadas con la supuesta cancelación masiva de reservaciones de viajeros de Norteamérica y Europa, que manifestaban tener “temor” de viajar a la isla.
El director del Instituto Dominicano de Aviación Civil, Alejandro Herrera, desmintió las cifras de la compañía norteamericana Forward Keys -que mostraba un salto en la cantidad de vuelos cancelados.
“No es verdad que haya una reducción de la afluencia de turistas al país, pese a la campaña que se desarrolla desde el exterior”, expresó.
La semana pasada, el ministro de turismo dominicano, Francisco Javier García, se reunió con más de veinte operadores turísticos de Nueva York, como parte de su estrategia para “contrarrestar la campaña de desinformación contra el turismo dominicano”.
García garantizó que República Dominicana “saldrá airosa de la campaña negativa de la que es víctima”.
Líderes dominicanos de NY alzan la voz
Ante la visibilidad mundial que están adquiriendo estos hechos, y el impacto en la comunidad quisqueyana de la Gran Manzana, los funcionarios electos dominicanos de Nueva York, se han expresado en la necesidad de informar la realidad y por ello están tomando acciones para demostrar que la isla es segura.
El congresista Adriano Espaillat, quien visitó al país caribeño para seguir de cerca las investigaciones toxicológicas que inició el FBI, en el caso del deceso de los estadounidenses, dijo a El Diario que “la muerte de un solo visitante es alarmante, pero no hay razón alguna para que se levanten banderas en contra de nuestro paraíso turístico”.
Recalcó que República Dominicana es un país seguro para visitar, tanto así que allí viven 300,000 estadounidenses.
“De acuerdo con el Departamento de Estado, no hay elementos para pensar que los decesos estén vinculados a un solo hecho, sino a circunstancias individuales. Estamos haciendo todo para garantizar que la próxima temporada alta, que arranca en enero, ya se hayan dispersado todas las dudas. Estamos trabajando en un plan de recomendaciones para más seguridad para la isla”, indicó el congresista.
Entre tanto, el concejal Ydanis Rodríguez, quien es presidente del Comité de Transporte del Concejo Municipal, indicó que planifica con otros líderes de la ciudad de Nueva York visitar Punta Cana, La Romana y Puerto Plata, “para dejar claro que la isla es segura”.
“Si partiéramos de casos de violencia o de situaciones aisladas, en donde lamentablemente pierden la vida viajantes, nadie viniera a Chicago, ni a Nueva York. Yo llamo al millón de dominicanos que vive aquí, que sean portavoces de que tenemos el destino turístico más bello del mundo”, dijo Rodríguez.
La asambleísta estatal Carmen de la Rosa, indicó que “estamos al frente de una tragedia que involucra a un grupo de víctimas, pero lo tenemos que ver como un alerta, porque si verificamos la proporción de viajeros que recibe la isla, diez casos no es una razón de alarma, sino de precaución”.
El Departamento de Estado ha mantenido la calificación de seguridad del país en el nivel 2, advirtiendo a los viajeros que tengan “mayor precaución” y que “los delitos violentos, incluidos los robos a mano armada, los homicidios y las agresiones sexuales, son una preocupación en toda la República Dominicana”.
Habla la calle
Que si las muertes de turistas se debe al exceso de otras sustancias, que si es una campaña orquestada de otros destinos del Caribe para quitarle fuerza a República Dominicana, que si los visitantes han muerto es por consumo exagerado de alcohol mezclado con medicamentos, que si existe el interés de medios de Estados Unidos de desprestigiar al país. Es solo parte del cruce emocional de explicaciones, que se escucha en cualquier esquina de Washington Heights.
“Yo soy dominicana hasta la tambora. Y te puedo decir que allá hay problemas de delincuencia como en cualquier otro sitio turístico, la diferencia es que por algunas razón, en solo un mes los medios lo han puesto todo en primera plana. Yo te puedo asegurar que también han pasado cosas peores en otras islas y otros lugares turísticos, pero no sale en la televisión”, comentó Altagracia Márquez.
Otro dominicano de manera airada aseveró que “esto no va a parar el turismo en nuestro país. Cuando un extranjero nos visita en la isla, los hacemos sentir como en casa. Te voy a dar un ejemplo, una de las turistas llegó enferma, estaba tomando medicamentos, lo mezcló con licor y por supuesto le dio un ataque, pero entonces la culpa, es del hotel que tiene bebidas malas. Hay una gran exageración de los medios al asegurar que todos han muerto por una misma razón”, razonó Guarinott Acevedo, quien hacía trámites para viajar en una agencia en la calle 181.
Turismo de Quisqueya en cifras:
- 56% es la reducción de número de estadounidenses fallecidos en República Dominicana en los últimos 3 años, según el Ministerio de Turismo.
- 176 ciudadanos estadounidenses han muerto en la República Dominicana por causas no naturales entre 2010 y 2018.
- 1.11 muertes por cada 100,000 turistas, es la tendencia de decesos, la más baja en comparación con otros destinos turísticos populares como México y Jamaica.
- 6.6 millones de personas en promedio viajan a República Dominicana cada año.
- 2.2 millones de esos turistas son estadounidenses que lo hacen durante meses de invierno.
- $7.6 mil millones recauda anualmente el turismo en la isla, lo que representa más del 17% de su economía.