Los 3 mitos del mal aliento que debes conocer
Existen mitos en torno al mal aliento. Lo cierto es que este es un problema real, y que se puede tratar
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El mal aliento es provocado por bacterias que se alojan en la boca producto de restos de alimentos que se quedan entre los dientes. Este problema también se conoce como halitosis, y representa un problema de salud para millones de personas.
Pero a pesar de ser un problema común, la desinformación es mucha y hoy develaremos 3 mitos que rodean esta enfermedad.
1. No debes tener mal aliento cuando te lavas los dientes
El cepillar los dientes no garantiza la erradicación del mal aliento. Es cierto que lo puede eliminar de forma momentánea, pero no permanente. Además, para que se pueda erradicar el mayor número de bacterias, el lavado debe durar por lo menos 2 minutos.
Por otro lado, las bacterias se terminan alojando en la lengua. Por eso también debe cepillarse. También es fundamental usar hilo dental para quitar la placa que se pueda formar y eliminar restos de alimentos que se queden entre los dientes.
En pocas palabras, el cepillado por sí solo no eliminará la halitosis. Es necesario un cuidado más profundo, cepillar bien los dientes y hacerlo por lo menos tres veces al día.
2. El enjuague bucal eliminara el mal aliento
Esto también es falso. El enjuague lo eliminará solo por poco tiempo. Además, para que el enjuague sea efectivo, debes buscar uno que sea antiséptico, que ayude a eliminar las bacterias que lo causen.
Procura que el enjuague tenga la aprobación o la certificación de la Asociación de Odontólogos de Estados unidos. También pídele sugerencias a tu dentista para que escojas un enjuague bucal que contribuya a neutralizar el mal aliento.
3. Al respirar sobre tu mano sabrás que tienes mal aliento
Esta es una idea muy arraigada entre muchas personas, y a lo mejor tú lo has hecho alguna vez. Sin embargo, esto es totalmente falso. Al hablar, los olores saldrán de la parte de atrás de tu boca, que es donde el mal aliento se origina.
Por otro lado, nosotros nos acostumbramos a nuestros propios olores, por lo que es difícil darte cuenta si tienes mal aliento o no con solo respirar sobre tu mano.
El consumo de cebollas y ajos también son los causantes del mal aliento, así como el cigarrillo y las bebidas alcohólicas.
Si sufres de mal aliento, recurre a tu odontólogo, quien te asesorará de la mejor forma. Además, realizarte limpiezas bucales contribuirá a manejarlo, y usar el enjuague, el hilo y un cepillado correcto serán de gran ayuda.
