Evo Morales dice que es “otra mentira más” acusación de que protegió a hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán
El expresidente se confiesa en entrevista con Telemundo Noticias
El líder boliviano Evo Morales comienza sus días muy temprano. Dice que en su exilio mexicano intenta trotar varios kilómetros todos los días, hacer más de 300 abdominales y extraña jugar al fútbol de salón. “No tenemos casi gente, no conozco equipos acá”, comentó en tono nostálgico mientras explicaba que vive en unas instalaciones militares del gobierno mexicano. “Seguramente volveré a jugar cuando vuelva a La Paz”.
En entrevista con Noticias Telemundo, Morales habló de las acusaciones en su contra, los motivos de su renuncia, su anhelo de reunirse en Buenos Aires con sus hijos y los planes para volver a Bolivia, país que gobernó durante 14 años hasta que tuvo que salir intempestivamente el pasado 12 de noviembre. Según cifras de la Defensoría del Pueblo de Bolivia, desde la votación del 20 de octubre han fallecido 33 personas, y otras 804 han resultado heridas en las diversas manifestaciones y enfrentamientos que se han desatado en todo el país.
“Hemos hecho todo para aportar a la pacificación de Bolivia, renunciamos a la candidatura aunque legal y constitucionalmente me corresponde”, dijo el dirigente sobre la convocatoria a nuevas elecciones. “Ya saben que los grupos violentos empezaron con el fascismo, solo me pregunto ¿por qué le tienen tanto miedo a Evo?”.
Morales responsabilizó al gobierno estadounidense, específicamente al Departamento de Estado, por su separación del poder: “Solo quiero decir que tengo información de alto nivel acerca de que el Departamento de Estado no quiere que vuelva, igual que la derecha boliviana golpista. Pido garantías para volver, tengo todo el derecho”.
También acusó a la Organización de Estados Americanos de “unirse al golpe de Estado” en su contra: “Luis Almagro se manchó con la sangre de los muertos de Bolivia. Según la OEA hubo irregularidades pero tenemos dos investigaciones que dicen que no hubo fraude. Evo ganó en la primera vuelta”, aseveró.
“Otra mentira más”
Sobre las acusaciones de que supuestamente protegió a Iván Archivaldo, el hijo del célebre narcotraficante mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán, el político boliviano dijo que se trata de “otra mentira más” y aseguró que se formó con “valores de la familia indígena como no mentir y no robar”.
El 22 de noviembre, el gobierno interino de Bolivia acusó a Morales de “sedición y terrorismo” por supuestamente incitar a sus partidarios a iniciar bloqueos alrededor de La Paz, la capital administrativa del país. “Esas son acusaciones políticas. Ahora dicen que soy racista, que soy discriminador, que colaboro con el financiamiento de alzamientos armados, no lo puedo entender. Solo trabajo por la paz pero con justicia social”, explicó durante la entrevista.
Sus dos hijos, Evaliz y Álvaro, llegaron a Buenos Aires el 23 de noviembre y el líder boliviano ha dicho públicamente que ambos fueron sometidos a interrogatorios antes de salir de su país.
En conversación con Noticias Telemundo, Morales denunció que le “están poniendo muchas trabas” para obtener su pasaporte en la embajada de Bolivia en México y que “sospechosamente ahora piden nuevos requisitos”.
Además expresó su deseo de asistir a la toma de posesión del nuevo presidente electo de Argentina, Alberto Fernández, quien también le ha ofrecido asilo en ese país: “Si no voy va a ser porque no quieren darme mi pasaporte. No respetan los derechos políticos, los derechos civiles, no respetan a un presidente”.
La vida después del poder
Morales suele usar cada intervención pública para hablar de sus logros como presidente y recordar que, entre otras cosas, Bolivia se ubicó en los primeros lugares de crecimiento económico de la región durante varios años de su larga gestión.
Sin embargo, el dirigente explicó sus planes políticos, si lo dejan regresar a su país: “Quiero compartir con mis compañeros, con ese movimiento sindical campesino indígena para evaluar, repasar los errores y aciertos de esta última etapa importante de mi vida. Sería siempre estar con el pueblo, con los más humildes”.
Además se mostró dispuesto a respaldar al próximo candidato del Movimiento al Socialismo, su partido, en las próximas elecciones: “Como dirigente sindical y como instrumento político de la liberación nacional mi obligación es acompañar (…) todavía no sabemos quién podría ser pero tenemos muchos jóvenes del campo, la ciudad, hombres y mujeres, hay líderes sindicales, buenos profesionales”.
Pese a la agitación política y la desestabilización ocasionadas por su cuestionada victoria en las pasadas elecciones, Morales dice que no se arrepiente de haber competido por cuarta vez a la presidencia: “No hay por qué desmoralizarse, por qué arrepentirse, esto es un proceso de cambio. Más bien hay que continuar por la vida, por la patria y porque ahora tenemos una nueva Bolivia y hemos hecho lo que ningún presidente o gobierno hizo en el país. Lo que más me duele son los muertos porque renuncié para que eso no pasara”.
(Por Albinson Linares)