Llegada masiva de brasileños a la frontera sur inquieta a Estados Unidos
Son la segunda población de migrantes capturados en el cruce de El Paso
Un grupo de migrantes brasileños detenidos en la frontera. Crédito: PAUL RATJE | AFP via Getty Images
Una población de solicitantes de asilo con la que no contaban las autoridades estadounidenses crece en la frontera de Texas.
Cientos de brasileños son detenidos en el cruce de El Paso, Texas, a diario. Los suramericanos son la segunda población de inmigrantes detenidos en esa región después de los mexicanos.
Según la agencia de noticias AP, unos 18,000 brasileños fueron detenidos en el último año fiscal. La cifra representa un aumento de 600% en la migración de ciudadanos del gigante suramericano. La situación inquieta a las autoridades federales como en su momento ocurrió con los países del llamado Triángulo del Norte (El Salvador, Honduras y Guatemala).
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“Estamos viendo, nuevamente, individuos de países extraterritoriales, extracontinentales, que vienen de Brasil, Haití, africanos”, dijo Mark Morgan, jefe de la Patrulla Fronteriza (CBP). El funcionario añadió que el gobierno de Estados Unidos llevará la situación con “el mismo nivel de compromiso que se nos ocurrió para abordar el tema con las familias del Triángulo del Norte”.
Razones de la migración
La recesión económica es la principal causa de la migración de brasileños a Estados Unidos, aunque las personas que cruzan la frontera solicitan asilo como víctimas de pandillas o por violencia doméstica. Se estima que unos 27 millones de brasileños se encuentran desempleados.
Los brasileños detenidos son puestos en la red de albergues Annunciation House hasta que son enviados donde sus familias. Florida y Massachusetts son los estados con la mayor población de inmigrantes de ese país. El reporte de AP dice que muchos abogados de inmigración no toman sus casos de asilo ya que no quieren darles falsas esperanzas.
El artículo también indica que la nueva ola de inmigrantes brasileños tiene menor capacidad económica que aquellos que los precedieron.
En tanto, el gobierno de Brasil viene colaborando con Estados Unidos al cambiar ciertas leyes para facilitar las deportaciones. Una de ellas fue dejar abordar aviones a los brasileños con orden de deportación que no tenían pasaporte válido.
