Sube tus defensas este invierno con probióticos naturales
Se dice que el sistema digestivo es nuestro segundo cerebro, su óptimo funcionamiento esta directamente relacionado con el bienestar general del organismo y las emociones. El consumo de probióticos es un hábito al que se le atribuyen los más espectaculares beneficios para vivir mejor y de manera saludable, conoce todos los detalles
El consumo de probióticos es uno de los mejores hábitos de salud que podemos adquirir, priorizar su consumo durante el frío invierno es una gran manera de fortalecer al sistema inmunológico, aumentar las defensas del organismo de manera natural y combatir todo tipo de enfermedades. Los probióticos son microorganismos vivos como son bacterias y levaduras, que se encuentran naturalmente en ciertos alimentos como los fermentados o bien en suplementos y se les atribuyen espectaculares beneficios medicinales. Atacan directamente el desequilibrio en la flora intestinal se puede deber a diferentes factores, entre los principales se encuentran los altos niveles de estrés, cambios hormonales, una alimentación deficiente y el consumo de antibióticos.
Los probióticos son indispensables para el correcto funcionamiento del sistema digestivo, el cual se relaciona estrechamente con el estado de salud general. El consumo de alimentos probióticos promueve que el organismo cuente con la óptima cantidad de bacterias benéficas para estar fuerte y sano. El consumo de probióticos se relaciona con maravillosos beneficios para la salud, entre los que se destacan los siguientes:
1. Combaten la obesidad y la diabetes
Son portadores de un gran poder para mejorar el metabolismo del azúcar y las grasas por lo que son un extraordinario aliado para combatir la obesidad y la diabetes.
2. Son un buen aliado para tratar padecimientos de la piel
Los probióticos actúan de manera muy positiva para combatir alteraciones en la piel, principalmente la dermatitis atópica, que se destaca por padecer síntomas como piel seca, erupciones rojas y comezón.
3. Ayudan a reducir los niveles de estrés
Son un gran aliado para mejorar tu estado emocional, esto se debe a la directa relación que existe entre el cerebro y los intestinos. El consumo de estas bacterias es ideal para promover la relajación y combatir estados de depresión y ansiedad.
4. Fortalecen el sistema inmune ¡Adiós gripes!
Si lo que quieres es fortalecer el sistema inmunológico, lo primero que debes de hacer es consumir probióticos. Se destacan por su capacidad de desplazar a los microorganismos nocivos y evitar su proliferación y colaboran en la formación de nutrientes esenciales como son las enzimas, las vitaminas y los ácidos grasos.
5. El mejor amigo de la digestión
Uno de los más populares beneficios de los probióticos se encuentra en sus impresionantes efectos sobre el correcto funcionamiento digestivo. Tienen la capacidad de restaurar la flora intestinal, acelerar el tránsito intestinal, combatir el estreñimiento, son ideales para tratar los episodios de diarrea infecciosa o causada por antibióticos, el mejor aliado para combatir los síntomas del síndrome de colon irritable y en general combaten todos los padecimientos digestivos que existen, como la distensión abdominal, los gases, la acidez, las agruras, entre otros ¡Todo desaparece!
La lista de los 10 probióticos naturales más populares:
- Yogurt: Siempre deberás de optar por las versiones naturales y orgánicas, sin aditivos, azúcares e idealmente envasado en recipientes de cristal.
- Té de Kombucha: Es un té verde o negro fermentado que contiene una muy buena cantidad de microorganismos.
- Queso blando: Se destaca por contener un grandioso número de cepas de bacterias lactobacillus casei.
- Chucrut: Repollo fermentado, típico de la cocina alemana. Es un producto que se debe de consumir en crudo para obtener todos sus beneficios.
- Kéfir de leche: Se obtiene del hongo kéfir y se destaca por su aporte en ácido carbónico.
- Kimchi: Una mezcla de verduras fermentadas como el repollo, el jengibre, ajo, nabos, entre otros. Originario de Corea y con un particular toque picante.
- Miso: Pasta de soja fermentada, ingrediente clásico de sopas japonesas.
- Tempeh: De soja fermentada, es un gran sustituto de la carne.
- Suero de mantequilla: Es un tipo de leche fermentada, similar a un yogurt líquido. Muy popular en Alemania y Holanda.