¿Es bueno comer carbón activado?
De ser usado por médicos para tratar intoxicaciones, ahora es parte de la moda "detox"
Entre las tendencias de alimentos se encuentra el carbón activado, es común en verlo en panes y helados. Aunque no aporta sabor, la atracción es la coloración negra que da a la comida y una textura especial. Actualmente este ingrediente también se encuentra entre los productos de la moda “détox”.
¿Funciona? ¿Qué tan bueno es consumirlo?
El carbón activado es un producto derivado de la combustión de material de origen vegetal, como madera o la cáscara de los cocos. Los fabricantes producen carbón activado calentando el carbón común con gas. Esto produce espacios o poros en el interior del carbón. Estos poros ayudan a que el carbón activado pueda “atrapar” sustancias químicas.
En los hospitales el carbón activado se usa comúnmente para tratar intoxicaciones, de acuerdo al Manual Merck se une al tóxico que queda en el aparato digestivo y evita que la sangre lo absorba.
El carbón activado no neutraliza todos los tóxicos. Por ejemplo, el carbón activado no se une al alcohol, al hierro, ni a la mayoría de los productos químicos del hogar.
Popularmente el carbón activado también ha sido usado para reducir el dolor, las flatulencias y la sensación de saciedad en personas con indigestión.
Sin embargo, no se puede considerar que consumir alimentos con carbón activado tenga acción “desintoxicante”, ya que las cantidades que se administran para tratar una intoxicación son muy superiores a las que se usan en comidas y bebidas. En un tratamiento médico pueden administrar en primera dosis hasta 100 gramos o 1 gramo por kilo de peso corporal.
Efectos secundarios
De acuerdo a autoridades sanitarias, el carbón activado puede considerarse seguro para la mayoría de las personas cuando se utiliza a corto plazo o cuando se aplica en las heridas.
El consumo de dicho carbón puede ocasionar estreñimiento y heces de color negro. En casos poco frecuentes podría generar desaceleración o bloqueo del tracto intestinal, regurgitación pulmonar y deshidratación.
No utilice carbón activado si tiene cualquier tipo de obstrucción intestinal o una enfermedad que frena el paso de los alimentos a través del intestino.
Ante la venta de cápsulas de carbón activado, se debe advertir que como se mencionó anteriormente, se ha considerado un elemento seguro si se usa a corto plazo, no de uso frecuente.
Antes de consumirlo debe consultar con su médico, sobre todo si está bajo algún tratamiento, ya que puede reducir la cantidad de medicamento que su cuerpo absorbe y con ello disminuir la eficacia, lo que podría poner en riesgo su salud.
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