Confirman primera muerte por coronavirus de preso federal. Estaba detenido por tráfico de drogas
Varios grupos de activistas han pedido la liberación de presos para evitar que COVID-19 cause estragos en los centros penitenciarios
El sistema federal de cárceles registró este sábado la primera defunción por coronavirus de uno de sus presos. La víctima mortal del nuevo brote cumplía condena en una prisión de Oakdale, Luisiana, y había estado ingresado y había dado positivo por COVID-19 el 19 de marzo.
Patrick Jones, de 49 años, estaba en una prisión de seguridad mínima pero había sido trasladado a un hospital. Un día después de permanecer ingresado, lo conectaron a un respirador, según la declaración de la Oficina de Prisiones. Jones, que tenía “patologías médicas previas”, pertenecía al sector más vulnerable frente al coronavirus.
El fallecido cumplía una condena de 30 años por tráfico de drogas, después de que en 2007 fuera declarado culpable de poseer medio kilogramo de crack con la intención de distribuirlo a menos de 1,000 pies de una centro educativo.
El fiscal general de Estados Unidos, William Barr, ordenó la semana pasada a la oficina de prisiones a enviar a arresto domiciliario a presos que tuvieran mayor riesgo a sucumbir ante el virus. Sin embargo, puso como condición que cualquiera puesto en libertad por este motivo tendría que pasar al menos 14 días aislados dentro de la propia prisión para reducir la posibilidad de transmitir el virus a la comunidad.
Hasta este viernes, un total de 14 presos federales y 13 miembros del personal penitenciario habían dado positivo por COVID-19, según confirmó la oficina de prisiones. El sistema federal de cárceles tiene un total de alrededor de 175,000 presos.