Enviar segunda ronda de cheques de estímulo de $2,000 costaría un dineral
Aprobar nueva ayuda económica para individuos y familias implicaría un desembolso mínimo mensual de $304 billones (mil millones), según los estimados
La posible aprobación de una medida en el Congreso de Estados Unidos para enviar una segunda ronda de cheques mensuales de al menos $2,000 dólares le costaría al Gobierno no menos de $304 billones (mil millones) al mes, de acuerdo con los cálculos realizados por Forbes.
Aunque se trata de estimados, ya que, incluso, cualquier medida podría ser enmendada en el proceso; para llegar a una cifra, Forbes utilizó las Estadísticas de Salarios de Seguridad Social y establecieron el número de contribuyentes que serían elegibles para recibir pagos bajo las medidas propuestas y cuanto implicaría al erario en términos fiscales.
A la luz de este detalle, se debe destacar que algunas de las legislaciones sobre la mesa claramente especifican que no todos los beneficiaros tendrían que haber presentado una declaración de impuestos, por lo que las cifras podrían incrementar.
“Emergency Money for the People Act”
En el caso de la medida presentada por Tim Ryan (D-OH) y Ro Khanna, el estimado de individuos elegibles es de 158.5 millones de personas, o el 94.53% de asalariados. El programa que se extendería hasta 12 meses, implicaría el desembolso de $316 billones.
“Economic Crisis Support Act”
La medida presentada por Kamala Harris (D-CA), Bernie Sanders (I-VT) y Ed Markley (D-MA) en el Senado provee para un mínimo de seis meses de incentivos, aunque el periodo por el que se podría extender está en discusión.
Bajo la legislación, más 152 millones de personas recibirían la ayuda. Su costo se estima en más de $304 billones mínimos al mes.
“Automatic Boost to Communities Act”
La llamada ley ABC, una de las menos sonadas, fue presentada por las representantes Rashida Tlaib (D-MI) y Pramila Jayapal (D-WA).
En esta propuesta, que no establece restricciones de elegibilidad, la ayuda podría extenderse al menos por un año luego del primero.
Bajo el plan, más de 168 millones de asalariados recibirían cheques; para un costo aproximado de más $336 billones mensuales.
Cabe señalar que estos estimados dejan fuera los incentivos adicionales dispuestos en las legislaciones por concepto de dependientes y cónyuges que no trabajan.
El alto costo de las propuestas es en parte lo que mantiene en tranque la discusión en el Congreso; aparte de las distintas visiones entre demócratas y republicanos sobre la dirección de las ayudas para paliar la crisis económico resultado del coronavirus.
Para muchos republicanos, las medidas inspiradas en una renta universal mantienen el estado de dependencia gubernamental y no promueven que la gente salga a trabajar.
Bajo el primer paquete de estímulo contenido en la ley CARES, unos 150 millones de estadounidenses se supone que reciban el incentivo mínimo de $1,200, lo que para muchos congresistas no es suficiente para estabilizar los hogares en medio de la crisis.