Cuarentena: músicos latinos llevan 75 días varados en un castillo alemán “embrujado” rodeado de lobos
Una orquesta nativa boliviana estaba en una gira europea cuando las fronteras fueron cerradas
Una orquesta de flauta de pan boliviana ha estado atrapada en cuarentena en los terrenos de un gran palacio del siglo XV a las afueras de Berlín (Alemania) por más de dos meses.
Más de 20 miembros de la “Orquesta Experimental de Instrumentos Nativos“ han quedado atrapados en los terrenos y edificios del Palacio Rheinsberg, un castillo con foso, que ha albergado a generaciones de miembros de la realeza alemana.
Los músicos, muchos de los cuales nunca antes habían salido de su país, esperaban pasar un poco más de medio mes entre salas de conciertos del este de Alemania, pero el coronavirus se encargó de cambiarles los planes.
El grupo llegó a Alemania el 10 de marzo esperando actuar en el festival MaerzMusik, el mismo día que ese país anunció su prohibición de grandes reuniones, seguido rápidamente por un bloqueo total. Una semana después, Bolivia cerró sus fronteras y el grupo quedó varado en la finca de 600 acres rodeado de 23 manadas de lobos y perseguido por el fantasma del monarca “Federico el Grande”.
“Todos bromeamos diciendo que el fantasma de Federico nos sigue y trata de hacernos tropezar”, dijo Camed Martela a BBC. “No suelo creer en esas cosas, pero parece que hay fantasmas en el terreno”.
Tracy Prado, quien acaba de unirse a la orquesta en diciembre, encontró lobos durante una de sus caminatas. “Me congelé de miedo, pero sólo estaban jugando a pelear y siguieron adelante”, dijo.
Entre los miembros del conjunto boliviano se encuentran jóvenes de 17 años. Para pasar el tiempo, el grupo practica hasta seis horas al día, camina con cuidado para evitar los lobos y juega fútbol.
Timo Kreuser, uno de los tres músicos alemanes que ayudaron a facilitar la gira fallida y se están quedando con el grupo, relata que en una de las ocasiones que los bolivianos jugaron un partido de fútbol en los campos en frente del castillo, pronto se encontraron rodeados por seis policías con equipo antidisturbios.
Los lugareños han donado alimentos y ropa, pero la estadía se está volviendo costosa. Berno Odo Polzer, el director de MaerzMusik, estimó que los costos han excedido los $35 mil dólares al mes, y aunque Alemania ya permite vuelos internacionales, las fronteras de Bolivia aún están cerradas.
“Hay peores lugares para quedar atrapados”, dijo Miguel Córdoba. “Cuando me despierto, veo salir el sol sobre el bosque y el lago. De vuelta a casa, sólo escucho el ruido del tráfico”.
Otros no están tan poéticos: “Nos sentimos abandonados”, señala Carlos, quien afirma que pasó varias horas ingratas por teléfono con la embajada boliviana tratando de encontrar una manera de regresar a su patria.
“He recibido cientos de mensajes diciéndome que deje de quejarme y que estoy viviendo como una princesa en un castillo alemán en una tierra de cuento de hadas”, ironiza Carlos.
La representación diplomática boliviana le dijo a BBC que está tratando de sacar la orquesta a principios de junio a través de Madrid, aunque no hicieron comentarios sobre cómo llegarían los músicos de Rheinsberg a España.