Emily Ratajkowski narra a detalle el día que fue abusada sexualmente por un fotógrafo
Un escalofriante relato que causa indignación
Emily Ratajkowski abrió su corazón y describió con crudeza un supuesto abuso sexual que sufrió de parte del fotógrafo Jonathan Leder.
En un artículo publicado este martes en New York Magazine, titulado “Comprarme de nuevo ¿Cuándo una modelo posee su propia imagen?”, la británica de 29 años habla a profundidad de los problemas que enfrenta por sus derechos y los problemas que tiene por las fotos que le toman el público.
El extracto que más ha llamado la atención es donde describe la ocasión en que Leder se aprovechó de una sesión de fotos para abusar de ella.
“Mi agente me dijo que debería comprar un boleto de autobús desde Penn Station hasta Catskills, donde un fotógrafo llamado Jonathan Leder me recogería y me reembolsaría el pasaje. Haríamos la sesión en Woodstock, para una revista artística de la que nunca había oído hablar y pasaría la noche en su casa… Esto era algo que la industria llama editorial no remunerado, lo que significa que se imprimiría en la revista y la ‘exposición’ sería mi recompensa”, explicó.
Emily narró que durante la sesión posó en lencería y luego desnuda. Durante el trabajo Leder le ofreció vino, a lo que ella accedió.
“Me habían enseñado que era importante ganarme la reputación de trabajadora y tolerante… En el momento en que dejé caer mi ropa, una parte de mí se disoció”.
Después de que la maquilladora salió del lugar, ella se recostó en un sillón “muy, muy ebria”. En la confusión sintió el ataque.
“Fue borroso, excepto por el sentimiento. No recuerdo haberlo besado, pero sí recuerdo que sus dedos de repente estaban dentro de mí… Más y más fuerte y empujando y empujando como si nadie me hubiera tocado antes o desde entonces. Realmente dolía mucho. Llevé mi mano instintivamente a su muñeca y saqué sus dedos de mí con fuerza. No dije una palabra. Se puso de pie abruptamente y se escabulló silenciosamente hacia la oscuridad por las escaleras”.
Leder reacción y calificó las declaraciones como “falsas”, según recogen medios estadounidenses.
“Me siento mal por ella porque está en un punto de su carrera en el que tiene que recurrir a tácticas como esta para ganar prensa y publicidad. Es vergonzoso”.
No es la primera ocasión en que Emily denuncia problemas laborales por su físico y el mal comportamiento de colaboradores.
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