Abogada de Trump causa polémica en Twitter por “síndrome de micropene”
Jenna Ellis se define a sí misma como cristiana

Jenna Ellis es una de las abogadas que acusan fraude electoral. Crédito: MANDEL NGAN | AFP / Getty Images
Jenna Ellis saltó a la palestra de la política nacional en la conferencia que lideró Rudy Giuliani, donde acusó a los medios de comunicación de desinformar sobre el supuesto fraude electoral en contra del presidente Donald Trump.
La abogada atacó a los periodistas e hizo referencia al programa de televisión La ley y el orden, al afirmar que la recolección de pruebas sobre el supuesto fraude apenas comenzaba.
“Esto no es un capítulo de La ley y el orden… este caso puede llevar semanas o meses”, expresó.
Ellis se ha vuelto uno de los focos de atención en redes sociales, donde sus críticos señalan su peculiar estilo y sus opiniones fuera de lo común y, por momento, agresivas.
Sobre su referencia al “síndrome del micropene”, la cual ha generado miles de reacciones, ocurrió en respuesta al analista de datos Frank Luntz, quien se refirió a la cuenta de Ellis como “la mejor en parodias”.
“El síndrome de micropene. Triste”, respondió ella sin tapujos.
https://twitter.com/JennaEllisEsq/status/1330346436760903682
Uno de los críticos de Ellis publicó una fotografía de la película Borat 2, donde Giuliani está recostado en una cama desabrochándose el pantalón.
“Eres mala Jenna. Rudy no puede evitarlo. Fue el plan de Dios”, escribió el usuario @DWhitINger.
That’s mean Jenna. Rudy can’t help it. It was God’s plan. pic.twitter.com/34dglOq5kx
— Sinead O’Rebellion (@DWhitINger) November 22, 2020
Un profesor de Políticas de la Universidad de Georgetown, Don Mynihan, respondió con ironía los comentarios de Ellis, quien se asume como cristiana.
“¿Qué significa el cristianismo para mí? Significa el derecho inalienable de lanzar acusaciones infundadas de micropenes a personas con las que no estoy de acuerdo. Y si odias eso, odias a Jesús”, tuiteó.
https://twitter.com/donmoyn/status/1330350027861069825
Ellis mantiene la teoría de que la elección fue fraudulenta y que “todos los saben” (sic), por lo que continuará la batalla legal del presidente Trump.