Béisbol en 2020: un récord de siete inmortales de Cooperstown perdieron la vida

Phil Niekro, el "abuelo" de las Ligas Mayores y máximo exponente del lanzamiento de nudillos, completó la triste cifra

Phil Niekro durante una ceremonia en Cooperstown en 2011.

Phil Niekro durante una ceremonia en Cooperstown en 2011. Crédito: Jim McIsaac | Getty Images

El béisbol sigue llorando la pérdida de Phil Niekro, uno de los peloteros más singulares y especiales de la historia. Pero en realidad al hacerse el balance del año, fueron siete jugadores entronizados en el Salón de la Fama de Cooperstown los que fallecieron en este catastrófico año 2020.

El expitcher de la franquicia de los Braves murió el sábado 26 de diciembre a la edad de 81 años en Georgia. Niekro estuvo en la Gran Carpa de 1964 a 1987, un total de 24 temporadas de las cuales 21 fueron con la organización de los Braves.

Niekro nunca ganó un trofeo Cy Young, ni tampoco una Serie Mundial, pero de todos modos escribió una de las historias más coloridas del béisbol al ganar 318 juegos y ponchar a 3,342 bateadores con un repertorio de una sola pitcheada: la bola de nudillos.

La bola de nudillos es el lanzamiento más raro, casi en desuso, y tal vez el más difícil. El serpentinero sujeta la pelota con las puntas de los dedos, mostrando los nudillos, y al ser lanzada la pelota, ésta sale con poca velocidad, sin rotación y sujeta a movimientos caprichosos provocados por la resistencia del aire.

El resultado es una trayectoria errática e impredecible que para bateadores y también para el receptor representa todo un acertijo.

Durante 2020, el año de la pandemia, murieron otros seis inmortales:

Al Kaline, jardinero que jugó los 22 años de su carrera con los Detroit Tigers, para quienes bateó más de 3,000 hits. Murió el 6 de abril.

Tom Seaver, el mejor lanzador de la historia de los NY Mets, con más de 300 juegos ganados y tres premios Cy Young. Murió el 31 de agosto.

Lou Brock, el veloz outfielder siempre de los St. Louis Cardinals, quien fue el rey de las bases robadas en MLB. Murió el 6 de septiembre.

Bob Gibson, el dominante lanzador también de los Cardinals, que en 1968 firmó la temporada más dominante de pitcheo. Murió el 2 de octubre.

Whitey Ford, uno de los grandes Yankees de todos los tiempos, con quienes ganó seis Series Mundiales. Murió el 8 de octubre.

– Y Joe Morgan, posiblemente el mejor segunda base de la historia y miembro clave de la “Máquina Roja” de Cincinnati. Murió el 11 de octubre.

Como dato curioso aportado por New York Times, los siete coincidieron en las Ligas Mayores en la temporada de 1967, aunque ninguno tuvo la longevidad de Niekro, quien todavía seguía lanzando en 1987 a los 48 años de edad. Poder hacerlo se lo debía sobre todo a la bola de nudillos.

En esta nota

Ligas Mayores Salón de la Fama del Béisbol
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain