Los ataques de nuestra generación
Se cumplen 20 años del 9/11 en medio del debate nacional por la retirada de tropas estadounidenses del territorio afgano
El 11 de septiembre es una fecha memorable para cualquier persona de nuestra generación. Ese día de 2001 pasó a la historia de la humanidad como una fecha trágica por los cuatro atentados con aviones que se estrellaron en un campo en Pensilvania; en el Pentágono, corazón del departamento de Defensa de los Estados Unidos en la capital política del mundo; y el intento de destruir la Casa Blanca, además del desplome de las Torres Gemelas en el World Trade Center del bajo Manhattan, capital mundial del poder financiero.
Los veteranos comparan el hecho con el ataque a Pearl Harbor que llevó a la nación a declararse en combate contra Japón y entrar a la segunda guerra mundial que finalmente llevó a frenar el avance de la Alemania Nazi.
Mucho se habla de los costos del ataque terrorista que dejó casi tres mil muertos, incluidos los suicidas que secuestraron los aviones y pérdidas superiores a los 10 mil millones de dólares con miles de enfermos que todavía padecen los ataques en New York.
Además, entonces se inició la guerra en Afganistán contra el terrorismo. Y por ironía del destino se cumplen 20 años de esos ataques en medio del debate nacional por la retirada de tropas estadounidenses del territorio afgano, ordenada por el presidente Joe Biden, dejando el espacio para la re-toma del poder por los talibanes.
En declaraciones para El Diario, el neoyorquino Clifford E, Stiebeck recordó que era uno de los empleados que estaba en el World Trade Center en aquella fecha y todavía en su memoria está la caída de la primera torre cuando el polvo se apoderó del ambiente. Aunque era temprano en la mañana de ese martes, todo estaba oscuro, en medio de la incertidumbre por que nadie creía en un atentado terrorista, ¡cómo en un país tan poderoso y en una ciudad tan importante como Nueva York!
Stiebeck dice que la confusión reinaba y que con sus compañeros pensaron en permanecer en la torre que todavía estaba en pie, por considerarlo más seguro, pero cuando el segundo avión se estrelló contra el edificio entendieron que era una acción terrorista y no el error de un piloto.
Cliff como lo llaman sus amigos recuerda cada momento cuando escapó del caótico sitio en el tren Path, luego en ferri por las aguas del río Hudson encontrando inmigrantes a su alrededor que como él no entendían. Así fue esa trágica fecha y todavía hoy los estadounidenses e inmigrantes que también fueron víctimas se pregunta cómo un atentado cambió para siempre al mundo.
Sofía Villa trabaja como Producer Writer en Univision NY. Preparó esta columna a título personal. y sus opiniones no representan a Univision Communications Inc.