Quién es Jennifer Bates, la trabajadora de Amazon que lucha contra la empresa para formar un sindicato

Jennifer Bates, una trabajadora de un almacén de Amazon, está intentando formar un sindicato dentro de la empresa. Sus esfuerzos la han llevado a testificar ante miembros del Congreso donde habló sobre las condiciones extenuantes que ha experimentado trabajando en los almacenes.

Bates, abuela de siete, estaba emocionada de que Amazon llegara a Bessemer, Alabama, de donde es originaria, debido al crecimiento económico que pensó que traería al área y la posibilidad de que un trabajo allí le permitiera pasar más tiempo con su familia.

Sin embargo, lo que encontró en Amazon fue un trabajo con turnos de hasta 10 horas que sintió que eran más extenuantes que las jornadas de 12 horas que realizaba en una empresa anterior.

Además, las caminatas que necesitaba hacer para moverse por un almacén del tamaño de 14 campos de fútbol, incluyendo subir y bajar tramos de escaleras, lastimó sus rodillas y provocó que sus piernas se hincharan, según contó.

“Trabajando 10 horas al ritmo que te empujan a ir, el tiempo libre es ir al médico por algo, bañarte, descansar, tomártelo con calma en tus días libres”, dijo Bates, de acuerdo con CNN.

Ella consideró dejar el trabajo. Pero Bates determinó que había una mejor opción: luchar para mejorar las condiciones laborales de la empresa.

Esa decisión finalmente llevaría a Bates a desempeñar un papel fundamental para formar un sindicato dentro de las instalaciones de Bessemer.

Junto a otros trabajadores, Bates  intentó crear lo que habría sido el primer sindicato con sede en Estados Unidos en los 27 años de historia de Amazon. En el proceso, la empresa exhibió sus tácticas agresivas para combatir la sindicalización.

Por invitación del senador Bernie Sanders, Bates testificó ante el Comité de Presupuesto del Senado el 17 de marzo. Hablando a través de Zoom.

“Amazon se jacta de que paga a los trabajadores por encima del salario mínimo. Lo que no te dicen es cómo son realmente esos trabajos”, dijo.

“Desde el principio, aprendí que si trabajaba demasiado lento o tenía demasiado tiempo libre en las labores, podía ser disciplinada o incluso despedida”, añadió.

Para formar el sindicato se llevó a cabo una votación por correo entre los trabajadores de Amazon debido a la pandemia. El proceso duró casi dos meses y terminó en abril. El resultado fue que los trabajadores votaron en gran parte en contra de un sindicato.

El Sindicato de Tiendas Minoristas, Mayoristas y de Grandes Tiendas (RWDSU, por sus siglas en inglés) apeló la elección, alegando que Amazon interfirió injustamente. En agosto, un funcionario de la Junta Nacional de Relaciones Laborales recomendó que se desecharan los resultados de las elecciones y que se celebraran nuevas elecciones debido a una supuesta mala conducta ilegal por parte de Amazon.

Y es que, para combatir la organización del sindicato, Amazon envió numerosos mensajes de texto a los trabajadores, los llamó a reuniones individuales y, al inicio de las elecciones, les pidió que asistieran a reuniones de grupo cada pocos turnos. Se cree que con estas tácticas influyó en la decisión de voto. La empresa también lanzó un sitio web antisindical en donde advirtió sobre el pago de cuotas de los sindicatos.

Por ahora, el esfuerzo sindical continúa en la comunidad de Bessemer. Bates, quien todavía trabaja en el almacén de Amazon, siente que podría perder su trabajo en cualquier momento, pero sigue en su lucha por formar un sindicato.

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