Gobernadora Hochul, expanda la cobertura de salud a la comunidad inmigrante de Nueva York

Optar por financiar la cobertura para inmigrantes a través de una exención federal apoyaría a nuestro sistema hospitalario al generar tasas de reembolso del Plan Esencial relativamente altas y sufragar sus costos de atención no compensados ($1,174 por persona cubierta cada año) ya que más neoyorquinos tendrían seguro

El año pasado, la gobernadora Kathy Hochul y la legislatura estatal acordaron extender la cobertura de salud a los inmigrantes mayores de 65 años que no eran elegibles para el seguro debido a su estatus.

El año pasado, la gobernadora Kathy Hochul y la legislatura estatal acordaron extender la cobertura de salud a los inmigrantes mayores de 65 años que no eran elegibles para el seguro debido a su estatus.  Crédito: Shutterstock

El año pasado, en su primer presupuesto como directora ejecutiva de Nueva York, la gobernadora Kathy Hochul y la legislatura estatal acordaron extender la cobertura de salud a los inmigrantes mayores de 65 años que no eran elegibles para el seguro debido a su estatus. También se extendió la cobertura de Medicaid, independientemente del estado migratorio, para las personas durante su primer año después del embarazo. Ambas medidas marcan un progreso para la cobertura de todos los neoyorquinos.

Estas ganancias incrementales no alcanzaron nuestros llamados de expansión a todos los inmigrantes de bajos ingresos. Pero dada la tasa de mortalidad materna inconcebiblemente alta de Nueva York, especialmente para las familias negras y latinas, esta extensión de la cobertura posterior al embarazo en el primer año de vida de un niño fue significativa.

En ese momento, la gobernadora pidió paciencia mientras su administración buscaba una solución para abordar el problema más amplio de extender la cobertura a todos los inmigrantes de todas las edades, algo que indicó que solicitaría a mediante de la aplicación de Exención de la Sección 1332 bajo la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio, conocido en inglés como el Affordable Care Act.

A la luz de esta declaración, esperábamos que la gobernadora usaría el presupuesto de este año para asegurar la autoridad para cubrir a los inmigrantes y eliminar la brecha de cobertura del estado, al buscar financiación federal para hacerlo.

Pero en lugar de aprovechar la oportunidad de que el gobierno federal cubra el costo del seguro médico para los inmigrantes, la gobernadora ahora ha propuesto retrasar las ganancias del año pasado. Peor aún, su propuesta de presupuesto actual presenta un lenguaje de exención que excluye a los inmigrantes. Al hacerlo, el estado está dejando pasar la oportunidad de ahorrar más de $500 millones anuales en fondos de Medicaid de emergencia que se gastan en atención de emergencia para inmigrantes.

Y eso no es todo. Optar por financiar la cobertura para inmigrantes a través de una exención federal apoyaría a nuestro sistema hospitalario al generar tasas de reembolso del Plan Esencial relativamente altas y sufragar sus costos de atención no compensados ($1,174 por persona cubierta cada año) ya que más neoyorquinos tendrían seguro.

Otros estados, incluyendo a California, Colorado, Illinois y el estado de Washington, han avanzado en la cobertura de inmigrantes. Nueva York debe ser un líder, no un rezagado, en iniciativas progresivas de atención médica. Y la prudencia, no la política reactiva, debe dictar la política de salud.

Mientras los legisladores de Albany negocian el presupuesto, es imperativo que la cobertura de inmigrantes se incluya en la Exención 1332 y su estatuto de implantación.

Y que nuestra gobernadora mantenga su promesa de financiar la cobertura para inmigrantes.

David R. Jones, Esq., es Presidente y Director Ejecutivo de Community Service Society of New York; Theo J. Oshiro es Co-Director Ejecutivo de Se Hace Camino Nueva York.

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