Puerto Rico: ¿Por qué hay toldos azules como techo en miles de casas seis años después del huracán María?

La distribución de este equipo formó parte de la llamada “Operación Techo Azul” que impulsó la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) como medida temporera para residentes de viviendas destruidas por el huracán

Toldos azules en viviendas de Puerto Rico

Foto tomada el 18 de junio de 2018 que muestra un vecindario de Vieques, Puerto Rico, con estructuras con toldos azules. Crédito: Dennis M. Rivera | AP


Nueva York – El secretario del Departamento de Vivienda de Puerto Rico, William Rodríguez Rodríguez, aseguró que la agencia ha atendido activamente los casos de residencias con toldos azules en lugar de techos a pesar de que miles de unidades aún no han sido reparadas o reconstruidas seis años después del huracán María.

Nosotros hemos trabajado activamente. Ese número de 3,000 se dio hace bastante tiempo. Era un número que salió de una evaluación que nosotros hicimos”, planteó a preguntas de El Diario.

El funcionario argumentó que, en el 2021, la agencia recurrió a un sistema de geolocalización para identificar las viviendas afectadas debido a que habían enfrentado escollos para ubicar a los damnificados.

“Es bien importante poner esto en contexto. Cuando yo llego como secretario, no había un inventario de techos azules; simplemente, (se atendía) al que solicitó y dijo que tenía un techo azul al programa. Si no, no sabíamos dónde estaban ni a quién pertenecía la vivienda. Se hizo un inventario a través de un sistema de geolocalización y después se hizo una visita a cada uno de los sitios por parte de organizaciones sin fines de lucro para poder identificar efectivamente dónde estaban estas viviendas y poder ayudarlos”, expuso.

A través del estudio, la agencia, en coordinación con organizaciones sin fines de lucro, identificó 3,646 toldos azules.

Sin embargo, por distintas razones, incluyendo que algunas de las viviendas estaban deshabitadas no se pudo localizar a todos los residentes.

“No pudimos dar necesariamente con los 3,000; hay viviendas que ya estaban abandonadas, que ya no se podía identificar a las familias. Pero todas las familias que pudimos contactar se pasaron al programa R-3 para poder recibir la asistencia a través del mismo que generalmente es reconstrucción por la extensión de los daños”, especificó.

El titular también destacó que en algunas instancias, a pesar de que el sistema digital identificó una vivienda con toldo, ni siquiera con la colaboración de las autoridades municipales pudieron ubicar de manera física la estructura.

O sea, no logramos ver el toldo azul a pesar de las gestiones con los municipios, con el sistema de geolocalización; en visitas comunitarias o porque nos escriben o nos hacen llegar información, entonces visitamos la comunidad y añadimos a una u otra familia que se quedó fuera del programa…”, indicó.

En vista de los alegados inconvenientes, el secretario emplazó a los residentes con toldos azules que aún no han iniciado el trámite de su caso a que lo hagan.

Lo primero es que lleguen a nosotros, que tengamos esa información, que los podamos ubicar, eso es lo primero; lograr identificarlos fue un reto porque no había pasado, no se había hecho. Originalmente, cuando hicimos el estudio de geolocalización, nos dio 18,000 puntos azules que había que visitar. Eso nos dio muchísimos techos azules que no necesariamente tenían que ver con toldos…podrían ser muchísimas otras cosas…”, explicó.

El entrevistado además relató que han habido casos en que los ingenieros que evaluaron e inspeccionaron la estructura concluyeron que la vivienda debía ser demolida, lo que no convenció a algunos de los afectados.

“Generar la confianza en la gente es bien complejo… que tú le vengas a decir a una familia que le vas a demoler la casa; tú entregarla, para luego rehacerla. Ese proceso de confiar en la institución y poner lo que ha sido tu casa para que hagan una demolición o una reconstrucción pues hay que ganarse esa confianza de la familia”, reconoció.

Alcance del Programa R3

El Programa R3 o Programa de Reparación, Reconstrucción o Reubicación es una iniciativa financiada con fondos federales de Subvención en Bloque para el Desarrollo Comunitario – Recuperación de Desastres (CBDG-DR) asignados a Puerto Rico luego de los huracanes María e Irma.

El objetivo es proveer viviendas seguras a través de asistencia para reparación, reconstrucción y reubicación en lugares no peligrosos.

El programa cuenta con una partida de $2,922,780,619 dólares, según el sitio web del Departamento.

R3 no otorga directamente dinero a quienes solicitan la ayuda, sino que le paga a las compañías contratistas escogidas por el Departamento de la Vivienda para llevar a cabo las labores de reparación y reconstrucción.

Rodríguez Rodríguez destacó que R-3 no es el único programa disponible. Los boricuas tienen la opción de solicitar ayuda a través del Programa de Mitigación en la Vivienda Unifamiliar financiado con fondos federales de Subvención en Bloque para el Desarrollo Comunitario – Mitigación (CDBG-MIT).

Tenemos otro programa que está corriendo simultáneamente que es el de Mitigación para la Vivienda Unifamiliar que pudiese atender esa necesidad en caso de que haya alguna familia que no haya reportado. Por eso, cada vez que tengo la oportunidad invito a la ciudadanía a que si conocen a alguien que tenga un toldo azul y que no ha sido, por alguna razón, atendido por ninguno de los mecanismos existentes o que no hayamos podido llegar a esa persona porque no salió a través de ninguna de las investigaciones o evaluaciones o instrumentos que hemos utilizado para lograrlo, que nos llame al Departamento de la Vivienda, que nos escriba ya sea por correo electrónico o vaya a alguna de nuestras oficinas regionales, para poder nosotros visitarlo e incluirlo como parte del programa”, abundó.

En el caso de este programa para el que se asignó $1.6 millones, se provee asistencia de mitigación a hogares con una amenaza inmediata y que son inhabitables debido a los daños causados por desastres recientes. Al programa también cualifican residentes en hogares certificados como una propiedad sustancialmente dañada bajo regulaciones locales y/o que se encuentran en una zona de alto riesgo.

Cifra de 3,000 toldos azules trascendió en audiencia de comisión legislativa

En una audiencia ante una comisión de la Cámara de Representantes de Puerto Rico en febrero del 2023, Mayte Texidor, supervisora de la división legal del Programa Subvención en Bloque para Desarrollo Comunitario-Recuperación ante Desastres (CDBG-DR) y de Mitigación de Riesgos (MIT) del Departamento de la Vivienda, reveló que, de acuerdo con las estadísticas recopiladas hasta el 17 de ese mes, el Programa R3 manejaba 3,751 solicitudes elegibles activas para reconstrucción y 4,597 para reparación”.

En ese momento, Rodríguez Rodríguez indicó que 1,872 casos de toldos azules fueron atendidos inicialmente tras los fenómenos atmosféricos.

Según Rodríguez Rodríguez, 405 familias, del total identificado a través de la evaluación geoespacial, se encontraban a la espera de comenzar el proceso de inspección de las viviendas.

En septiembre pasado, Manuel Calderón Cerame, portavoz del Partido Popular Democrático (PPD) en la Legislatura Municipal de San Juan, denunció que en San Juan, capital de la isla, habían más de 200 casas con toldos azules.

La información surge de las estadísticas del Departamento de Vivienda del municipio divulgadas tras una audiencia de presupuesto en el organismo legislativo.

“Operación Techo Azul”

Se suponía que los toldos azules fueran un remedio temporero ofrecido por la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) para que damnificados por los eventos atmosféricos en Puerto Rico protegieran sus hogares de daños adicionales.

La distribución de este equipo formó parte de la llamada “Operación Techo Azul”. En un comunicado de FEMA de octubre de 2017, la agencia establece una diferencia entre los toldos azules y los techos azules del Cuerpo de Ingenieros del Ejército de EE.UU. (USACE).

“La Operación Techo Azul, dirigida por el Cuerpo de Ingenieros ofrece una cubierta provisional de laminado plástico azul reforzado, usando pedazos de madera asegurados al techo, con clavos o tornillos para ayudar a prevenir daños adicionales a la propiedad, hasta que se puedan hacer las reparaciones permanentes (ROE). Los techos azules son diseñados para durar 30 días”, especificaron las autoridades federales en un comunicado en octubre de 2017.

Fema y USACE añadieron: “Además, FEMA tiene toldos azules, comúnmente llamados toldos de auto-ayuda, disponibles a través de los municipios para que los propietarios de vivienda los recojan y cubran de manera provisional el contenido de los hogares que sufrieron daños, hasta que hagan las reparaciones permanentes. Los toldos de FEMA son piezas grandes de material impermeable que se amarran a las estructuras con ojales. Los toldos son gratis. El propietario de la vivienda es responsable por la instalación de los toldos de auto-ayuda”.

Sigue leyendo:

Programa federal Nueva Energía para placas solares en Puerto Rico: secretario de Vivienda explica por qué boletos se acabaron en minutos

Secretaria de Energía pide cuentas sobre reconstrucción en Puerto Rico en visita a la isla

Secretaria de Energía federal apuesta a estudio PR100 para avanzar con energía renovable en Puerto Rico durante visita a la isla

SNAP, energía renovable, Ley 22 y estatus, cuatro temas clave en la agenda para Puerto Rico en el 2024

En esta nota

FEMA Huracán María Puerto Rico
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain