Más hispanos están envejeciendo con VIH pero chocan con muchas barreras en el sistema de salud
Este martes 16 de julio activistas de Nueva York declararon el 'Día de la Concientización sobre los Adultos Mayores con VIH': más de la mitad de quienes viven con este virus en el país, ya entran en avanzada edad
Activistas de Nueva York protagonizaron este martes, un capítulo inédito en la lucha contra el VIH-Sida, al lanzar por primera vez un llamado de atención sobre la necesidad que tienen los adultos mayores hispanos, que están envejeciendo enfrentando esta infección viral, de superar barreras culturales, lingüísticas y médicas que todavía persisten en el sistema de salud nacional.
Desde este 16 de julio, se declaró en el Bajo Manhattan, el día de la ‘Concientización Nacional sobre los Adultos Mayores Hispanos con VIH’, como una forma de visibilizar algunas tendencias que requieren un abordaje urgente para una población, por definición vulnerable: 23% de las personas mayores de 45 años que son seropositivos en VIH en el país, son de origen hispano.
Además, el 6% de los hispanos viviendo con VIH en el país, mayores de 45 años no sabían su estatus en 2022. Y más del 52% de los latinos positivos en este virus ya son mayores de 45 años.
La iniciativa surgió desde la Comisión Latina Sobre el Sida (Latinoaids), en Nueva York, la cual es parte de la Red Nacional de Liderazgo en Salud Hispano/Latinx, que integra casi cien organizaciones comunitarias, líderes comunitarios y expertos en salud pública de todo Estados Unidos, Puerto Rico y las Islas Vírgenes.
“Obviamente con un solo evento, no vamos a avanzar en nuestros objetivos de visibilizar esta alerta. Las personas latinas que estamos envejeciendo con VIH, hemos sido sistemáticamente ignoradas. No existe una data clara que demuestre nuestras necesidades. Y aunque en Nueva York, hay más recursos, si se compara con otras ciudades, tenemos mucho que trabajar”, destacó Luis Nava, director de las Iniciativas de Adultos Mayores de Latinoaids.
“Hemos sido ignorados”
El objetivo que se traza este nuevo movimiento, es que se establezca en la nomenclatura del sistema de salud, acciones precisas para incluir a esta comunidad que envejece, casi siempre, bajo la presión emocional de los estigmas, la discriminación y la soledad. Más aún si son hispanos e inmigrantes.
Se demandan programas específicos, que tengan alcance cultural y lingüístico, que les permita a estos pacientes vulnerables, tener alternativas de una vida saludable física y emocionalmente.
“Todavía hoy por temor, muchos hispanos dejan de ir al médico, porque no hablan el idioma, o porque tienen barreras económicas, para dar seguimiento a las terapias que le permitirían tener una mejor calidad de vida. Es un tema muy particular, que apenas estamos empezando a discutir. Hace algunos años la expectativa de vida, de quienes tenían este diagnóstico era muy corta. Ahora los avances médicos les permite envejecer y vivir por décadas. La idea es que lo hagamos dignamente””, señaló Nava.
La “cronificación” del VIH
Desde mediados de los años 90, las terapias antirretrovirales marcaron un hito para quienes viven con VIH, pues alargaron la supervivencia, mejoraron la calidad de vida y “cronificaron” la enfermedad, abriendo el camino a la primera generación de personas que ya son adultos mayores, con una condición que dejó de ser una sentencia de muerte.
Hace algunos años, sin los tratamientos desarrollados en los últimos años, el virus solía evolucionar a Sida. En la inmensa mayoría de los casos, los infectados, terminaban muriendo por alguna o varias enfermedades oportunistas.
En todo el mundo, más de la mitad de las personas con VIH tienen más de 50 años. Hace una década, este porcentaje era solo del 8%. Las estimaciones son que en 2030 la cifra alcanzará el 80%.
De hecho, el Departamento de Salud del Estado de Nueva York (NYS) calculó que para el año 2020, el 70% de las personas que viven con VIH, tendría 50 años de edad o más.
Este “número estadístico” impone muchos desafíos para Nueva York y la necesidad de reorientar la atención hacia miles de portadores del VIH, para los cuales esta infección, en sí misma, no significa un problema, pero sí las heridas dejadas por años de agresiones y prejuicios. Y todas las incertidumbres que significa envejecer.
Afincado en los hispanos:
- 84% de las mujeres diagnosticadas con VIH en la Gran Manzana en 2022 eran negras o hispanas, y de todos los hombres el 83% eran negros o hispanos.
- 62% que confirmaron un diagnóstico positivo de VIH en 2022 eran hombres que practican sexo con hombres (HSH), una mayoría significativa (82%) eran negros o latinos.