¿Por qué se come pavo en el Día de Acción de Gracias? Esta es la verdadera historia
Los ingleses trajeron pavos para criarlos y cultivarlos, donde se volvieron bastante comunes en el siglo XVI
El pavo es un ave de celebración ideal, por su tamaño sirve para alimentar a más personas. Crédito: Shutterstock
La celebración del Día de Acción de Gracias es una de las festividades más importantes de la cultura estadounidense. Se remonta a 1863, cuando Abrahán Lincoln la convirtió en un día especial para agradecer y bendecir por todo lo que tenemos y celebra con una cena que tiene como protagonista el pavo.
Las primeras referencias de la cena de Acción de Gracias, que incluía el pavo las hizo famosa autora estadounidense Sarah Josepha Hale, quien promovió un Día de Acción de Gracias, anual hasta que el presidente Abraham Lincoln lo convirtió en feriado oficial en 1863, explicó Anne-Marie Green de CBS News.
Desde entonces, cada cuarto jueves del mes de noviembre se celebra en todos los Estados Unidos el Día de Acción de Gracias, en una tradición que una a la familia y a toda la nación en buenos deseos y en torno a una cena llena de sabores y de historia.
¿Cómo nace el Día de Acción de Gracias?
El platillo principal de la cena de Acción de Gracias, es una tradición que nació en 1621 cuando los colonos europeos llegaron a Massachusetts y se establecieron en esas tierras, recibiendo ayuda de los nativos para cultivar productos como el maíz y la calabaza que ahora forman parte de la tradición.
Y fue gracias a una grandiosa cosecha, luego de un invierno muy duro, que decidieron celebrar con un festín todo lo que tenían y compartirlo.
El profesor de historia en la Universidad Texas A&M, Troy Bickham, explica a CBS News que el pavo es un “ave de celebración ideal”, por su tamaño sirve para alimentar a más personas y “constituyen un impresionante plato central para cualquier gran comida de celebración”.
“Por estas razones, los ingleses trajeron pavos para criarlos y cultivarlos, donde se volvieron bastante comunes en el siglo XVI”, agrega, por lo que no es de extrañar que “cuando los peregrinos llegaron a América, el pavo no les habría resultado desconocido”.
¿Cómo es la actual cena de acción de gracias?
En la actualidad la cena de Acción de Gracias sigue teniendo como protagonista el pavo y otras guarniciones que son muy características como el puré de papas, las judías verdes, la calabaza, el maíz y una salsa que no puede faltar que es la salsa de arándano.
Se trata de ingredientes que no son originarios de Europa, como el maíz y la calabaza eran alimentos que comían los nativos americanos y provienen de México y América, y la papa es un ingrediente de Los Andes, en Suramérica según Bruce Smith, científico principal del Museo Nacional de Historia Natural del Smithsonian.
Pero fue gracias a esa relación que se estableció entre colonos y nativos que surgió esta deliciosa cena.
Evolución de algunos ingredientes de la Cena de Acción de Gracias
Bickham sostiene que algunos platos de Acción de Gracias, son más recientes, como la salsa de arándanos, que en el primer Día de Acción de Gracias, eran amargos e impopulares en las colonias hasta que se les agregó azúcar y se hicieron populares.
“La salsa de arándanos rojos enlatada apareció por primera vez en 1912, pero no se vendió a nivel nacional hasta 1941”, agrega.
Por su parte, el profesor de historia de Tennessee Tech, Troy Smith, en una publicación compartida en el sitio web de la universidad expone que el pastel de calabaza, tal como se conoce en la actualidad, se hizo popular más recientemente.
“Si bien el pastel de calabaza estuvo en el menú durante más de cien años, no fue hasta 1929 cuando la compañía Libby comenzó a producir una línea de calabaza enlatada, simplificando el proceso de elaboración del pastel, que se convirtió en un alimento básico del Día de Acción de Gracias”.
Con el paso del tiempo, la industrialización de algunos alimentos como mencionaron los expertos, la cena del Día de Acción Gracias combina la tradición de aquellos primeros alimentos con los gustos de los estadounidenses.
Los platos que se sirven este día siguen teniendo el pavo como centro del festín, acompañado de judías verdes, calabaza y batata. Se sirve puré de papas con la salsa con gravy, verduras como: zanahorias, coles de bruselas, ensaladas y pan de maíz.
Hay una variedad de postres que tiene ingredientes como calabaza, batata, nueces pecanas, chocolate y manzana, sabores típicos de estas fiestas.
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