Más estrictos en registros de votación
Aumentan los llamados para exigir que se demuestre tener la ciudadanía
WASHINGTON, D.C.- Existen al menos 31 iniciativas a lo largo del país, que incluyen nuevas exigencias para que los electores prueben su identidad antes de votar. Entre ellas, los llamados para demostrar ciudadanía están creciendo, mientras las acusaciones de fraude electoral por parte de indocumentados han tomado protagonismo.
Aunque en su mayoría son anécdotas contadas en general por grupos conservadores, la percepción de que los inmigrantes sin estatus legal votan, está creciendo en este ciclo de elecciones.
Tanto así, que los llamados por incorporar la prueba de ciudadanía para que un individuo pueda registrarse, ya se ha materializado en propuestas legislativas estatales. Es el caso de Carolina del Sur, donde SB304 esgrime esta condición, como primera exigencia para el futuro elector. Este es el segundo proyecto de ley del estado, en el área de registro de votantes.
Expertos en el área como Hans von Spakovsky, del Centro para Estudios Legales y Judiciales de la conservadora Fundación Heritage, defienden con fuerza esta postura. “Es un problema actual y muy concreto. Desconocemos su magnitud, pero no hay que mirar muy lejos”.
Spakovsky se refiere específicamente a un caso revelado recientemente por NBC en Florida, donde se descubrió que la inmigrante Hinako Dennett, estaba registrada para votar, aunque no es ciudadana.
Entre los escasos reportes que han tocado el tema de manera tangencial, figura uno realizado en 2005 por la Oficina de Supervisión Gubernamental GAO, donde se especificó que 3% de los 30 mil individuos llamados a presentarse como jurados -a partir de listas de registros de votantes-, no eran ciudadanos estadounidenses.
Pero en la opinión de Laura Murphy, directora de la oficina legislativa de Washington de ACLU, el número de personas que han intentado votar sin tener ciudadanía “es ínfimo”. “Algunos incluso lo hacen por error, ya que creen que por el hecho de estar en proceso de naturalización, pueden votar”, explicó.
“Creo que la retórica antiinmigrante en este país, ha impactado el surgimiento de leyes que exigen identificación para votar. La mayoría de los indocumentados no quieren ir a un edificio gubernamental por miedo al arresto”, aseguró a La Opinión.
Hasta ahora, 31 estados han presentado leyes que exigen nuevos métodos de identificación. Ocho ya fueron promulgadas en estados como Alabama, Kansas, Mississippi, Rhode Island, Carolina del Sur, Tennessee, Texas y Wisconsin.
El Departamento de Justicia ha disputado varias de las medidas, entre ellas la propuesta promulgada por Carolina del Sur. Sin embargo, organizaciones ligadas a grupos minoritarios aseguran que queda mucho más por hacer. Grupos como LULAC, Hispanic Federation y LCLAA lanzaron una campaña ayer, cuyo objetivo es registrar al menos 200,000 votantes en 24 estados. Pero sus esfuerzos también se concentrarán en educar a la población sobre nuevas medidas locales, para no perder la validez del voto.
“Aunque no estamos de acuerdo con este tipo de iniciativas, si en algunas áreas las leyes ya están vigentes, estamos enfocados en ayudarle a la gente a conseguir una identificación para que puedan votar. Parte de nuestro rol, es educar a la comunidad en esta área”, explicó Brent Wilkes, director ejecutivo de LULAC a La Opinión.
Un reciente estudio de Brenan Center for Justice indicó que al menos cinco millones de votantes podrían ser privados de su derecho a votar en la elección 2012, debido a la implementación de legislaciones estatales con mayores exigencias para registrar electores.