Dos ayudas clave para comprar una casa
Agencias y Estado le echan una mano para comprar su primera vivienda
Las tasas de interés hipotecarias están bajas y eso hace que comprar una vivienda gane cierto atractivo. Ahora bien, con los altos precios de las casas, sobre todo en la ciudad de Nueva York y otros condados del estado, dar el pago inicial o afrontar el costo del cierre del contrato pone muy difícil que muchas personas con pocos ahorros, sobre todo los jóvenes, siquiera piensen en ello.
Si es su caso, piénselo de nuevo.
Como en todo, la clave es la información y normalmente son los loan officers o especialistas en hipotecas independientes o de los bancos, quienes les pueden dar respuestas y soluciones.
Yvon Ponce de Leon, especialista de hipotecas en el banco comunitario Ridgewood Savings Bank, explica que en el Estado de Nueva York hay ayudas para estos dos problemas y acaba con un mito: no se necesita un 20% o un 10% del precio como pago inicial. Hay bancos que están concediendo hipotecas cuando se pagan cantidades iniciales menores y no son créditos FHA (de los que hablamos el 27 de agosto), que son una opción más.
“Hay productos y agencias que les pueden ayudar dependiendo de los ingresos y el precio de la compra. Se puede usar el dinero de becas y ayudas para el downpayment o pago inicial o para los gastos de cierre en primeras viviendas”, explica esta especialista. Estos programas están destinados a personas y familias con ingresos medios y bajos lo que los convierte en muy atractivos para quienes cuentan con paychecks que no son elevados y casi no pueden ahorrar.
El primer programa que sugiere es el programa First Home de House Preservation and Development de la Ciudad de Nueva York que ayuda con un máximo de $40,000 que se pueden destinar al pago inicial o los costos de cierre. El programa está administrado por Neighborhood Housing Services of New York City y, por ejemplo, una familia de cuatro personas con ingresos anuales de $85,350 puede optar a esta ayuda que tiene condiciones. Una de ellas es que esté en uno de los cinco condados de la ciudad y que se viva 10 años en ella como mínimo.
Ponce de León dice que el especialista en hipotecas puede guiar a quienes soliciten esta ayuda aunque los pasos por esta solicitud los tienen que dar los interesados.
Esta especialista explica que los gastos de cierre suelen ser del 4% o el 5% del precio de una casa. En el caso de que esta cueste $700,000 esta ayuda sería suficiente para cubrirlo.
El otro programa que sugiere Ponce de León es del Estado de Nueva York, SONYMA que permite que un hogar con dos personas con ingresos de 102,000 puedan acceder a ayudas para el pago inicial o cierre. Ella explica que son los bancos los que trabajan con estos programas de ayudas.
Acceder a las cantidades que se ponen a disposición de los compradores de la primera vivienda no complica la concesión del crédito por parte de los suscriptores de este (underwritters, que son los que finalmente dan luz verde o no a la hipoteca).
Lo que Ponce de León recomienda es que independientemente de la ayuda o la posición financiera de cada uno, quienes vayan a comprar una casa se preparen con tiempo y se informen sobre distintas préstamos, productos de distintos bancos y ayudas públicas o privadas.
Hay bancos que ofrecen préstamos para los costos de cierre y que no se incluyan en la hipoteca. Esto es algo que hace mucha gente pero los encarece porque se pagan intereses durante 30 años (o la duración del crédito) por ello.
Es su trabajo. Ponce de león explica que a ella le gusta empezar a trabajar temprano con los compradores para prepararles para solicitar el préstamos. “¿Levantarse un día y decidir que se quiere comprar? Eso no se puede. Hay que empezar temprano, educarse para buscar un dinero que está ahí, entender el mercado lo que es asequible y vigilar nuestro crédito”.
De la mano
Como especialista en el mercado de las hipotecas, Yvon Ponce de León dice que toma tiempo con sus clientes para guiarles por las decisiones que mejor se adaptan a sus circunstancias y para que reflexionen sobre sus presupuestos como dueños de una vivienda con hipoteca.
Cuando habla de la relación con sus clientes explica que cuando se sienta con ellos les hace preguntas sobre la etapa en la que están de su vida, los productos que ofrece el banco. En muchas ocasiones alude a llevarles de la mano por un camino con opciones y baches además de revisar gastos que no se incluyen en la solicitud de préstamo. Todo con la idea de hacer más llevadero el proceso, que puede tomar meses, sino también para vivir con un compromiso tan largo.