7 cosas que pueden pasar si falleces sin un testamento

Fallecer sin un testamento, conocido legalmente como morir intestado, puede traer complicaciones inesperadas tanto para tu familia como para tus bienes.

Al no dejar claro quién debe recibir qué, el estado toma el control y decide cómo se distribuirán tus activos, lo que puede resultar en conflictos familiares, gastos legales elevados y situaciones inesperadas.

Aquí te contamos siete posibles consecuencias de no tener un testamento.

1. El estado decide lo que ocurre con tus bienes

Si mueres sin un testamento, las leyes de sucesión intestada del estado se encargan de distribuir tus bienes.

Estas leyes asignan la propiedad según las relaciones legales más cercanas, como hijos, padres, hermanos u otros familiares.

Sin embargo, las decisiones del estado pueden no coincidir con tus deseos personales, dejando fuera a personas a las que querías beneficiar, como amigos cercanos o entidades benéficas.

2. El dinero podría acabar en manos de parientes lejanos o del estado

Si no hay familiares cercanos que puedan heredar, parientes lejanos podrían aparecer reclamando su parte.

Si no se encuentran herederos, el estado podría tomar control de tus bienes, lo que dejaría a tus seres queridos sin nada y redirigiría tu patrimonio a personas o lugares que no deseabas.

3. Las relaciones familiares podrían destruirse

La falta de un testamento claro puede generar disputas familiares. Hermanos, hijos, padres o incluso ex cónyuges podrían pelear por tus bienes, causando divisiones y resentimientos que podrían perdurar durante generaciones.

Además, sin un testamento, los miembros de la familia podrían sentir que las decisiones del fallecido no fueron correctamente reflejadas.

4. Parte del dinero se destinaría a abogados

El proceso de sucesión legal, conocido como ‘probate’, es largo y costoso.

Si no existe un testamento, este proceso se complica aún más, lo que genera una mayor dependencia de abogados.

Los honorarios legales se deducen directamente de la herencia, lo que puede reducir significativamente el monto que tus seres queridos recibirían.

5. El cuidado de tus hijos podría verse afectado

Si tienes hijos menores y no has dejado un testamento, los tribunales decidirán quién será su tutor.

Esta decisión podría no coincidir con tus preferencias y podrían quedar al cuidado de alguien que no comparta tus valores en cuanto a educación o crianza.

Además, este proceso puede generar incertidumbre y demoras, complicando aún más un momento ya doloroso.

6. El cuidado de tus mascotas podría verse comprometido

A menudo, las mascotas son olvidadas en la planificación testamentaria.

Sin instrucciones claras y fondos destinados a su cuidado, tus mascotas podrían quedar en manos de alguien que no esté preparado para atenderlas adecuadamente, o incluso ser enviadas a un refugio.

7. Tu pareja de hecho podría quedarse fuera

Aunque algunos estados otorgan ciertos beneficios a parejas de hecho, en su mayoría no tienen los mismos derechos que los cónyuges legales.

Si no estás casado y no tienes un testamento, tu pareja podría quedarse sin derecho a reclamar tus bienes, incluso si han compartido una vida y un hogar juntos.

Esto podría dejarles en una situación económica difícil e incluso perderían la vivienda que compartían.

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