sueñaN con la paz en Colombia
Hace más de dos años que comenzaron las negociaciones de paz entre las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) y el gobierno del Presidente Juan Manuel Santos.
Pero la guerra sigue a pesar de los avances en las conversaciones que las dos partes sostienen en La Habana.
El presidente Santos cree que pueden llegar a un acuerdo final antes de fin de año. Voceros de las FARC creen que puede tardar unos meses más.
Ya se han unido a las conversaciones militares que combaten a la guerrilla más antigua del continente. También lo han hecho víctimas de la violencia.
Pero ¿cómo ponerse de acuerdo?
El caso de Constanza Turbay da fe de lo difícil que es llegar a un acuerdo. Ella fue a La Habana y habló de cómo los guerrilleros habían asesinado a cuatro de sus parientes para destruir el poder político de su familia en Caquetá.
Según cuenta la revista británica The Economist, el jefe de la delegación de las FARC en La Habana, Iván Márquez le pidió perdón. Fue una de las primeras veces que un representante de la FARC admite haber cometido un crimen.
Pero pedir disculpas no es suficiente.
Los colombianos sueñan con la paz, pero no quieren que los crímenes cometidos por la FARC, los paramilitares, y las fuerzas armadas queden impunes.
Cuando el entonces Presidente (hoy Senador) Álvaro Uribe llegó a un acuerdo con otro grupo guerrillero el Ejército de Liberación Nacional (ELN) las personas halladas culpables de crímenes fueron condenadas a ocho años de cárcel.
Ahora las FARC piden perdón por algunos de sus crímenes, pero algunos de sus comandantes continúan la guerra colocando bombas a los oleoductos del gobierno y haciendo emboscadas a los militares.
La guerrilla mantiene la necesidad que tuvieron en irse a las armas hace más de 50 años, e insisten en que en cualquier acuerdo no se castigue a los guerrilleros por crímenes cometidos.
No es fácil.
El Presidente Santos, quien fuera Ministro de Uribe, abandonó la política dura de su predecesor y ahora aboga por la paz negociada.
Uribe critica a Santos cada vez que puede. Él no cree que pueda haber una paz negociada sin que las FARC reconozcan sus crímenes y sus líderes estén dispuestos a asumir los castigos necesarios.
La mayoría de los colombianos busca la paz. Por eso votaron para reelegir a Santos este año