Las mejores horas de Queens Plaza
En el Condado del Mundo, que la guía Lonely Planet eligió este año como premier destino turístico en EEUU, en los últimos años ninguna zona ha cambiado tanto -y a notable celeridad- como Queens Plaza, el principal eje de transporte público entre Queens y Manhattan.
Basta levantar la vista, desde la estación Queensboro Plaza, para ver los estrenados flamantes edificios, y más grúas, brazos eléctricos y camiones apuntando hacia nuevos proyectos y remodelando antiguos inmuebles. Desde 2001 se han construido aproximadamente cinco mil unidades residenciales.
Desaparecieron las “factorías” y “warehouses”, la oficina del NYS Department of Labor, y la sala de apuestas hípicas OTB. En cada cuadra aparecen letreros que anuncian “edificio residencial en construcción”, “alquileres de lujo”, “proximamente nuevo hotel aquí”.
Tiempo atrás fue un área oscura, deprimente, infectada de droga, alcohol y basura diseminada por doquier, de oferta sexual entre vagabundos y antisociales, pero hoy Queens Plaza es la postal misma de la reurbanización, con decenas de flamantes rascacielos que presumen lujosos departamentos, como el 27 on 27th (habitado en su totalidad, según informa su administrador John Ciervo), Crescent Club, QLIC Rentals, the Millstone, edificios de oficinas como Space Works y Gotham Center.
También hay bares y pubs (The Beast Next Door, The Baroness Bar), bistros, restaurantes y diners (Penthouse 808, Cranberry), que agregan otro color y onda al barrio. Sirve mencionar las nuevas escuelas y centros médicos como Bright Horizon NYC y The Floating Hospital, respectivamente.
“En la esquina antes habían strip-clubs y me dicen que era sucio, pero ahora es muy tranquilo, me encanta, siempre vamos a comer al Cranberry”, dice Mónica E. Palacios, quien trabaja en la oficina consular de Ecuador, abierta hace seis años en la esquina de Queens Plaza North y Crescent St.
“Aquí prestamos servicios comunitarios, emisión de poderes, también ofrecemos clases de inglés, computación, biblioteca comunal, servicios de salud para todos los hispanos, es decir no necesitan ser ecuatorianos”, agregó Palacios, originaria de Cuenca.
Queens Plaza se ubica entre 21st Street y Jackson Ave/Northern Boulevard, al oeste de Queens Boulevard y Long Island City. Tiene dos estaciones de subway: la homónima subterránea y la “elevada”, Queensboro Plaza. Sin duda, es una intersección clave de transporte público en la ciudad. (En 1914 se abrieron las vías del tren 7, mucho antes que la zona fuera poblada).
Aterriza JetBlue
En 2012, el ex alcalde Michael Bloomberg, acompañado del senador Charles E.Schumer y otras autoridades, inauguró las nuevas oficinas centrales de la popular aerolínea en el antiguo edificio Brewster, frente a la estación Queensboro Plaza. El opening cementó la renovación del área junto a otros proyectos como Dutch Kills Garden, a un costo de $45 millones de dólares. Se plantaron árboles y flores, se construyeron bancas, zonas de peatones, bici sendas, y otras amenidades. Finalmente, tras un largo período de abandono, la principal vía de entrada a Queens luce acorde para las cámaras.
Hoteles para todo bolsillo
Desde la plataforma de Queensboro Plaza, además de los edificios residenciales, se divisan los letreros de los nuevos hoteles que realzan el área. Destacan el Verve Hotel, Hilton Garden Inn, Howard Johnson, Fairfield Inn & Suites by Marriott, Holiday Inn, Dutch Kills Inn, Q4 Hotel y The Paper Factory Hotel con su acogedor Mundo New York, un restobar de onda latinomericana. Mandy Aguiar es asistente de gerencia del Hilton Garden Inn. Sobre el boom hotelero, dijo: “Obviamente esta zona es ideal por su cercanía a Manhattan, seguridad, limpieza. Estamos muy contentos de brindar nuestros servicios a la comunidad en Queens Plaza, un área muy dinámica, segura. Recibimos muchos turistas especialmente asiáticos”.
Turismo local en Queens
Desde Queens Plaza se llega en poco minutos a Manhattan “pero a veces los turistas y nuevos residentes prefieren quedarse ‘local’ y conocer otros lugares de Queens. Eso es parte del atractivo de la zona”, opina Brian Ginzberg, quien trabaja en la recepción de Crescent Club y vive en Sunnyside. El joven recomienda visitar Flushing Meadows Park, el terminal East River Ferry en Hunter’s Point South, Gantry State Park, Socrates Sculpture Park, entre otros atractivos.
Selly García
Una sonrisa para los turistas
Una sonrisa para los turistas
Nació en Brooklyn, vive en Ozone Park. Soltera.
Hija de madre boricua y padre dominicano.
Trabaja desde hace sietes meses en el “front desk” del Q4 Hotel (q4hotel.com)
29-09 Queens Plaza N/718-706-7700
¿Qué hacías antes de trabajar aquí?
Manejaba un bus escolar.
¿De dónde son los turistas?
De todos lados, principalmente brasileños, chinos, franceses, alemanes, también mexicanos, españoles.
¿Algunas particularidades del hostal?
Hhmmm…no se aceptan turistas locales, o sea de Nueva York, es solo para viajeros de afuera. Aquí no tenemos ascensor, pero no creo que se necesita. Son solo tres pisos y además las escaleras son un buen ejercicio (risas). Los huéspedes no se quejan.
¿Cuántas habitaciones hay y cuánto cuesta la más barata?
Son setenta cuartos y el valor es treinta y cuatro dólares por noche, por persona. Tenemos cinco “housekeepers”.
¿Otra particularidad?
No tenemos restaurant pero los huéspedes pueden prepararse su comida en la cocina del basement.
Los turistas quieren conocer….
Lo típico, la Estatua de la Libertad, Times Square, los edificios, Central Park.
¿Por qué piensas es popular el área?
Ahora es muy segura, hay muchos policías. También por qué está muy cerca de Manhattan pero sin los precios de allá. Muchos salen a pasear en bicicleta y cruzan el puente Queensboro.
¿Lo que más disfrutas de este trabajo?
Me da la oportunidad de conocer e interactuar con los huèspedes, personas de otros países y descubrir un
mundo nuevo.