Esfuerzo de equipo la clave de los Knicks

Nueva York – Los Knicks remontaron una notable desventaja para lograr importante victoria por 120-103 anoche sobre los Cavaliers de Cleveland y, de paso, llegaron de nuevo a los .500 durante un delirante encuentro en el Madison Square Garden.

Cuando apenas faltaban 1:39 para terminarse el tercer periodo, el conjunto local, que siempre estuvo por debajo en la pizarra en los momentos anteriores, pudo alcanzar a los visitantes e irse adelante por un punto (77-76) para seguir aumentando hasta el pitazo final.

Fue muy notorio en el tercer periodo la aportación de la banca en las anotaciones, encabezado por Steve Novack, quien logró encender la bujía local con cinco disparos de tres puntos en ocho intentos, para terminar con 17 tantos en sólo 17:20 de juego.

Carmelo Anthony y Jeremy Lin se combinaron para ser los mejores encestadores de Nueva York con 22 y 19 puntos. Lin también logró 13 asistencias, mientras que Tyson Chandler capturó 15 rebotes y anotó 13.

Amar’e Stoudemire también contribuyó a la victoria local con 14 anotaciones y cinco rebotes, mientras que Iman Shumpert vino del banco para anotar 12.

Los Cavaliers, que pusieron su marca en 13-20, comenzaron anotando a su antojo en el primer cuarto y gran parte del segundo, pero comenzaron a fallar en los momentos cruciales de la recta final.

Antawn Jamison tuvo la mejor anotación de los visitantes y del partido con 23 puntos, logrando también 10 rebotes. Kyrie Irving hizo 22 y Daniel Gibson 13.

“Hay que darle crédito al juego en conjunto que logramos”, dijo Lin. “Creo que comenzamos muy lento y tomamos el aire que necesitábamos en el momento preciso”, agregó.

La primera mitad para los Knicks (18-18) fue un desastre.

Tras sonar el pitazo inicial, los visitantes atacaron con rapidez y concentración, terminando el primer periodo arriba 31-42; siguieron inspirados al entrar al siguiente tramo, con su buena puntería y excelente defensa.

Nueva York no encontraba el camino de avanzar en ese tiempo y siempre estuvo por debajo en los primeros dos cuartos, demostrando pobre defensa y fallos al canasto, lo que aprovecharon los Caveliers para irse a descansar al vestidor con ventaja holgada de 12 puntos (61-49) en la primera mitad.

“Hay que darle todo el crédito del mundo a los Knicks, porque creimos que no nos iban a dejar abajo, cuando tomamos buen despegue”, dijo Byron Scott, coach de los Cavaliers. “Pienso que fue un cansancio físico en conjunto lo que nos atrapó”, agregó.

El entrenador de los Knicks Mike D’Antoni, sin embargo, dio también dio el crédito al buen acoplamiento que se demostró en su club desde los momentos finales del tercer acto.

“Fue una demostración de acoplamiento”, dijo.

Chandler hizo su práctica rutinaria antes del juego, convenciendo al coach Mike D’Antoni a inscribirlo en la lista del quinteto que abrió el encuentro.

Chandler, centro principal de Nueva York , es uno de los jugadores que más han colaborado en el repunte del equipo del Garden, tras el sensacional desempeño del base asiático Jeremy Lin, en las postrimerías de la primera mitad de esta temporada. Pero su última lesión en la muñeca izquierda, puso en duda su participación, hasta ayer, para volver a jugar .

“El está bien. Lo encuentro muy restablecido y celebro que esté en el plantel con los cinco abridores”, subrayó el coach de los Knicks, al referirse al mejor defensa del club local .

Chandler se lesionó su muñeca durante el juego que ganaron los neoyorquinos contra los Mavericks de Dallas en el Garden. Volvió a participar en el juego que perdió su club frente a Heat, en Miami; y la lesión se agravó, a pesar de usar una venda en todo el trayecto.

“Trataba de atrapar la bola, pero tenía alguna dificultad. Eso, sin embargo, no me impedía jugar”, dijo Chandler.

El centro local, quien participó con los campeones Mavericks en la temporada pasada, también practicó con su muñeca vendada, pero aseguró que estaba entrar en acción en este primer juego de la segunda mitad.

“El receso ayudó mucho a que Chandler se recuperara. Esa es buena noticia. También nosotros aprovechamos para corregir y agregar otras tácticas”, dijo D’Antoni.

Manifestó el entrenador local que Tyson fue al médico y los informes fueron buenos. “No hay problema”, exclamó. Por otro lado recalcó que dentro de las prácticas se hizo énfasis en el juego del principal armador, en este caso, Jeremy Lin.

“Tratamos de corregir varios de errores cometidos, durante en juego en Miami. Esto es natural para un jugador joven y con poca experiencia”, subrayó el entrenador. “El ser armador no es nada fácil, porque está en el deber de mover el balón, correr bien y aprovechar para anotar en ciertos casos”, dijo.

Luego del juego de anoche, los Knicks no tienen actividad en la cancha hasta el domingo (1:00 p.m.), cuando viajen a Boston a combatir contra los Celtics, mientras que el martes visitarán Dallas, para enfrentarse otra vez a los campeones de la NBA.

constantino.viloria@eldiariony.com