Obama y familia asisten a misa
Reverendo compara economía con misterio de la Resurrección
WASHINGTON, D. C. (EFE).- El presidente estadounidense, Barack Obama, y su familia asistieron ayer a la misa del Domingo de Pascua en una iglesia cercana a la Casa Blanca, en la que el reverendo comparó la economía mundial con el misterio de la resurrección.
El Presidente, su esposa Michelle, y sus hijas, Sasha y Malia, caminaron desde la Casa Blanca hasta la cercana iglesia episcopal de San Juan, templo extraoficial de los presidentes, poco antes del mediodía donde asistieron a la misa del Domingo de Resurrección del reverendo Luis León.
El párroco León dijo que la economía mundial se parece al misterio de Resurrección: “La arruinas si intentas explicarla. No puede ser explicada”.
Durante la misa los miembros de esa congregación tuvieron la oportunidad de dar la paz al Presidente estadounidense y su familia, mientras que tras tomar la comunión fueron interrumpidos por los saludos de los feligreses.
El reverendo recordó la inestabilidad que reina en el mundo y aseguró: “A veces me gustaría no leer los periódicos o ver las noticias en la televisión”.
En opinión de León la reconstrucción de Mogadiscio, capital de Somalia, es un ejemplo de resurrección. “Podemos decir que todos son musulmanes, ¿y qué? También eso es prueba de resurrección”, aseguró.
La iglesia episcopaliana de San Juan, un pequeño templo de principios del siglo XIX que se eleva en el lado opuesto a la Casa Blanca de la plaza Lafayette, es considerada extraoficialmente “la de los presidentes”.
Todos los mandatarios estadounidenses, desde el cuarto, James Madison, la han visitado y uno de sus bancos tiene una pequeña placa que lo designa como “el banco del Presidente”.
Obama y su familia han asistido a servicios religiosos en esa iglesia ocasionalmente desde su llegada al poder.
El Presidente y su familia también participan en oficios religiosos en otras iglesias de la capital, que visitan de manera rotatoria.