Fans dan vida al Omnilife
Seguidores del América observan a un aficionado de Chivas que presume su cámara. Crédito: MEXSPORT
ZAPOPAN, México (NTX).- En un ambiente de fiesta, Chivas y Águilas disputaron ayer el segundo Clásico de Clásicos en el Estadio Omnilife, después de que en el primero de ellos se impusieran los rojiblancos a su acérrimo rival.
Varias horas antes de que comenzara el enfrentamiento, miles de aficionados comenzaron a arribar a este escenario, que conforme pasó el tiempo se comenzó a teñir de rojo y blanco en su mayoría.
Niños, jóvenes y adultos, con sus playeras de las Chivas, caminaban por los alrededores de este inmueble para disfrutar de los típicos antojitos, así como para llevarse un bonito recuerdo de esta edición del Clásico como gorros, llaveros, banderas, balones y uniformes, entre otros.
Aunque fueron minoría, los seguidores americanistas no se dejaron intimidar y expresaron con sonoras porras el amor a su camiseta, además de sus tradicionales cánticos.
De manera paulatina, todas las gradas se empezaron a ocupar, y un monumental abucheo cimbró el inmueble cuando los 11 titulares americanistas ingresaron al césped sintético y una gran ovación se desató para albergar a los jugadores rojiblancos.
Un silbatazo dio la señal y los 22 gladiadores salieron impulsados para dejar todo dentro de la cancha, ante un ensordecedor alarido de “¡Chivas, Chivas, Chivas!”.
Horas antes de que iniciara el Clásico Mexicano, la Policía de Zapopan reportó que se detuvo a 76 personas, debido a que en la cabecera norte del Omnilife se iba a presentar un “choque” entre la porra del América y su contraparte del Guadalajara.
De inmediato la Policía, apoyada por el Escuadrón Montado, se puso en medio de ambos grupos de aficionados; muchos no hicieron caso a las indicaciones de replegarse, dañando una patrulla y poniéndose agresivos con los oficiales.
“Se generaron 76 detenidos plenamente justificados por actos vandálicos. Hay daños mínimos a una unidad de esta corporación, pero existen. Algunos de ellos [aficionados] bajo los influjos de las bebidas embriagantes, otros por inhalante y el tercero factor que tomamos fue el vandalismo”, comentó Carlos Herrera, subinspector de la corporación zapopana.
