Listo para su renacer
Fernando Carrillo plantea su regreso a la telenovela tras más de una década de ausencia
Fernando Carrillo, el galán venezolano de exitosas telenovelas como Abigail, María Isabel y Rosalinda, prepara después de 12 años su regreso a este género que le valió su proyección internacional.
“Durante estos 12 años he estado haciendo muchas cosas: he hecho cine, teatro, comencé mi carrera como empresario, nació mi hijo Ángel Gabriel y enfrenté la prueba más dura de mi vida como ha sido la muerte de mis padres”, dijo Fernando Carrillo, quien perdió a su madre hace ocho años y a su padre en mayo del año pasado.
Su actividad empresarial lo ha mantenido ocupado como vicepresidente para la expansión global del grupo Sunset World, propietario de seis hoteles ubicados México, tres de ellos en el estado de Quintana Roo, en la Riviera Maya y tres más en Cancún.
El pasado mes de noviembre el actor de 42 años se mudó a Los Ángeles para participar como conductor de la sexta temporada del programa de concurso Tengo talento, mucho talento, de Estrella TV, que comenzó a transmitirse en mazo y que ya se encuentra en la etapa final para definir al ganador de 100,000 dólares.
“Tengo un contrato por este programa y hay una alianza con el grupo Liberman Broadcasting para producir contenido para su televisora”, reveló el padre de Ángel Gabriel, su primogénito, quien ya tiene tres años y vive en Miami junto a su madre, con quien el actor asegura tener una buena relación, a pesar de lo difícil que resultó en un principio.
“Yo creo que el tiempo limó las asperezas, se limaron solas. Ella se dio cuenta que tenía en mí a un aliado y a un gran amigo. Somos socios en la crianza de un hijo que merece lo mejor de nosotros. Ella se casó recientemente, está tranquila, contenta y sabe que cuenta conmigo incondicionalmente”, afirmó el venezolano hablando de Margiolis Ramos, madre del niño.
En una etapa que define como de madurez, crecimiento espiritual y progreso profesional, Carrillo trabaja de manera simultánea en varios proyectos para el mercado hispano.
“También estoy en conversaciones que comienzan a definir mi regreso a las telenovelas. Afortunadamente hay opciones en México, Argentina y Miami, por el momento”, dijo.
Con una carrera actoral que inició en 1986 con La dama de rosa, la fama del venezolano se ha extendido y mantenido en los más de 70 países donde se han transmitido y aun se transmiten sus telenovelas.
Acaba de terminar una película en República Dominicana, Lotoman II, donde junto a los comediantes Raymond Pozo y Miguel Céspedes tiene un papel protagónico. “Su estreno está previsto para el uno de noviembre y esperamos que iguale o supere el gran éxito de Lotoman I, la película más taquillera en la historia de República Dominicana”, destacó.
Enamorado de su prometida iraní Sara Bayat, con quien tiene un año de relación, y reticente a dar más información sobre la boda que anunció a finales del año pasado, se confiesa como un hombre de familia, un romántico empedernido que cree en el amor, en el matrimonio y en el hogar.
“He cometido equivocaciones, sin duda alguna, todos las cometemos. Trato de vivir una vida cercana a Dios, sin juzgar a nadie. Si voy a juzgar a alguien primero me juzgo a mi mismo y trato de corregirme primero yo”, aseguró.
Dentro de sus errores, incluye el haber brindado su apoyo al presidente venezolano Hugo Chávez.
“Eso de inmiscuirme en la política fue una equivocación. Me acerqué a la política un poco inspirado por el sueño de mi padre quien fue un luchador social toda su vida. Pero muchas cosas que fui viendo me fueron decepcionando. No me gusta arrepentirme de las cosas que hago, pero sin duda alguna fue una equivocación. Solo espero que Venezuela pueda de verdad progresar, tomando en cuenta a todos los venezolanos, especialmente a los mas necesitados”, finalizó.