Hollywood inicia su “Manhattanización”
El Concejo de Los Ángeles aprueba un plan para permitir la construcción de edificios de hasta 50 pisos.
En unos años, Hollywood dejará de ser el destino donde los turistas caminan viendo hacia el suelo, tratando de identificar los nombres de sus estrellas favoritas en las banquetas, y se convertirá en un lugar donde se avanza con la mirada hacia arriba, buscando el límite de los rascacielos.
Ese cambio de imagen, que ha sido considerado la “Manhattanización” de Hollywood, recibió este martes luz verde en el Concejo de Los Ángeles, abriendo las puertas a los desarrolladores inmobiliarios interesados en construir torres de hasta 50 niveles en uno de los vecindarios más famoso del mundo.
Antes de que el Cabildo tuviera en sus manos la propuesta, de hecho, ya había revisado el proyecto de una promotora inmobiliaria de Nueva York que pretende edificar dos torres, una de 48 niveles cerca de la icónica torre de Capital Records, y otra de 13 pisos, en la popular esquina de Hollywood y Vine.
El llamado Plan Comunitario de Hollywood, que fue aprobado con el voto unánime de los concejales, se cocinó por ocho años en medio de una creciente oposición de vecinos temerosos de que los edificios comerciales y residenciales, integrados en lo que se planifica como una “pequeña ciudad”, afecten el rostro del barrio e incrementen aún más el tráfico.
“Si elevan la densidad poblacional en Hollywood seremos prisioneros en nuestros hogares”, expresó Steven De Cordoba, un residente que dijo tener pocas vías de acceso a su hogar, en las colinas.
Otra preocupación es que la altura de las construcciones bloquee la vista hacia el cartel de Hollywood y el observatorio Griffith. Esto, advierten los opositores, podría resultar en un descenso notable de los millones de turistas que cada año pasean por ese lugar.
“Los negocios perderán clientes”, pronosticó Jim Van Duzer, quien vive ahí desde hace 48 años. “Es un plan equivocado, en el lugar y tiempo equivocados”, insistió.
Si bien los detractores lo ven como una concesión para los promotores inmobiliarios que podría generar ingresos a las débiles arcas del Ayuntamiento, éste último afirma que sólo trata de crear una guía que determine el crecimiento del destino.
En 1988 se actualizaron por última vez las normativas de planificación.
“Este plan definitivamente no acelera el crecimiento, sino que dirige ese crecimiento”, aseguró Michael LoGrande, director del Departamento de Planeación de la ciudad.
Quienes están a favor de la propuesta, insisten en la necesidad de crear trabajos en una ciudad golpeada por una tasa de desempleo del 12%, y de ampliar el sistema de transporte público y la oferta de vivienda (parte del proyecto plantea ofrecer apartamentos de bajo alquiler a los pobres).
“Traerá más espacios verdes, carriles para bicicletas, banquetas más ‘caminables’ y lo convertirá en un Hollywood más vibrante”, dijo Beth Marlis, vicepresidenta del Instituto de Música de North Hollywood.
Una de las promesa es que el destino ofrezca una “vida peatonal animada”, con amplias banquetas y carteles luminosos a nivel de calle, una copia del Manhattan de Nueva York, la principal competencia turística de Los Ángeles.
“El plan refuerza el rol de Hollywood como centro de entretenimiento y de medios de comunicación”, resaltó Robbie Hunter, secretario ejecutivo del Concilio de Construcción y Comercio de los condados de Los Ángeles y Orange.
Como su voto lo reflejó, no se escucharon voces tan críticas en el Concejo Municipal al revisar la iniciativa. “Una pesadilla es un crecimiento sin planeación”, dijo Eric Garcetti, representante de esa comunidad en el Cabildo. “Votemos sin miedo y con esperanza”, pidió a sus colegas.
La “Manhattanización” de Hollywood, como lo llaman despectivamente sus opositores, forma parte de un esfuerzo del municipio por desarrollar un plan urbano integral que dirija la expansión de cada barrio.
Ed Reyes, presidente del Comité de Planeación del Cabildo, recalcó que sin esta guía las comunidades corren más riesgo de ser invadidas por torres multipisos.
Los detractores, por su parte, reclaman que antes de allanar el camino a las inmobiliarias se deben llenar los locales vacíos por la crisis económica y resolver los problemas de inseguridad, pobreza, falta de estacionamiento, entre otros, en la zona.
“Hollywood no es la ‘Capital de los rascacielos’ y nunca debería serlo”, señaló Rosemary Demonte, quien ha vivido en el vecindario por muchos años. “Siento que nos tengamos que ver en la corte para traer justicia”, amenazó la residente, anticipando la aprobación del plan.