Primeros auxilios: Aprende qué hacer con un esguince
Una torcedura, un esguince o una luxación no es una lesión menor que se cure con un ungüento o un masaje, especialmente en el caso de los niños.
Si tienes hijos pequeños en casa seguramente sabrás que las luxaciones y torceduras son una emergencia de todos los días.
Los niños corren, juegan, no saben que algunos de sus juegos más inocentes pueden tener consecuencias, a veces dolorosas.
Un esguince ocurre cuando una articulación sufre una separación debido a la rotura de los ligamentos. Puede ser grave o menor.
Una luxación es cuando uno de los huesos unidos por una articulación se sale de su lugar. También se conoce como dislocación.
Generalmente la persona sufre un fuerte dolor, no sólo al apoyar o hacer fuerza. La zona se inflama y se pone de un color rosado o rojo. Se experimenta dolor al tocar y la inflamación puede ser incluso visible a primera vista.
Lo primero que debes hacer es tranquilizar al paciente, especialmente si es un niño pequeño.
Luego debes inmovilizar la parte afectada, pidiéndole que deje de moverla o apoyarla. La articulación lastimada no debe cargar ningún peso.
Aplica paños de agua a temperatura ambiente para que se enfríe la zona y haz que la zona se mantenga elevada ligeramente.
Antes de aplicar algún vendaje o ungüento, lo mejor es que consultes al médico. Tampoco dejes que ingiera ningún medicamento contra la inflamación o el dolor. Esa decisión debes dejarla en manos de tu médico de confianza.
Cuanto antes acudas con el especialista, menos dolor sufrirá la persona afectada.