Pamela Rodríguez da un giro en su música con “Reconocer” (Video)
“Reconocer” fue nominado Grammy Latino por Mejor Álbum Vocal Pop Contemporáneo.
La cantautora peruana Pamela Rodríguez promociona su disco “Reconocer”, nominado a Mejor Álbum Vocal Pop Contemporáneo en la edición de este año de los premios Grammy Latino.
Esta es la segunda ocasión en la que la peruana es nominada a los premios otorgados por la Academia Latina de la Grabación, después de ser candidata a Mejor Nuevo Artista en 2006, año en el que Pamela llamó la atención de la industria musical con su primer disco, “Perú Blue”, donde mezcló jazz y música peruana.
Luego lanzaría “En la orilla” (2007), siguiendo el mismo esquema musical de su predecesor, y a finales de 2011 lanzó “Reconocer”, donde hace un gran giro en su propuesta, atado a su nueva vida.
“Estar lejos de mi país, la soledad y luego gestar a una criatura que me lanzó, un poco, al abismo de contestarme la identidad de quién era yo como espíritu, como humano y como mujer”, explicó a Efe Pamela en entrevista en Miami.
La soledad y la distancia de su país la sintió cuando se fue a vivir a Venezuela después de contraer matrimonio con el economista español Raúl Baltar Estévez, presidente ejecutivo de Banco Exterior en Venezuela, con el que tuvo a una hija, llamada Luana.
“No entendía muy bien cómo iba a ser madre yo y otras cosas que quería plantearme”, recordó de aquellos momentos que vivió en su nuevo hogar Venezuela, donde se hizo un “estudio chiquito”.
Explicó que el título del álbum, “Reconocer”, lo eligió por ser un palíndromo (que se lee igual al derecho y al revés), pues “da esa sensación de espejo y reconocer esa mirada interna con honestidad”.
Fue de esta manera que la cantante empezó a plantearse las canciones, en las que quiso reflejar distintas “cosas que estaba sintiendo”.
Aparte de las letras, Pamela dio un giro en la música, donde dejó su fusión peruana para producir un trabajo pop orgánico que le ha llevado a optar a uno de los premios Grammy Latino que se entregarán el 15 de noviembre en Las Vegas.
De principio a fin, “fue un proceso muy íntimo” grabado en Nueva York junto a los amigos que hizo en sus años de estudio en música y etnomusicología en la Universidad de North Texas.
“Quise mantener todo en mi círculo de amistades. Mi productor es mi mejor amigo de la universidad, el bajista es mi exnovio, la diseñadora es súper amiga mía”, explicó.
Grabaron 13 canciones y “Ligera love”, que se convirtió en el primer sencillo, estuvo inspirado en su abuela conservadora, que la cantante imaginaba en el “cielo entregándose a las pasiones sin pensar en compromisos”.
Rodríguez consideró que las letras de sus canciones tienen mensajes más profundos que las acostumbradas canciones de “amor y desamor”. Por ejemplo en “Mantra”, la cantante analiza a la mujer en la sociedad, donde “no logramos salir de etapas difíciles”.
“Seguimos detrás de un balaustre y no nos llegamos a abrir respecto a nosotras mismas. Ahora hay una lucha de la mujer contra la propia mujer. Y me parece muy doloroso todo esto del canon de la belleza y del cuerpo”, opinó.
Por ello, repite en “Mantra” el verso “no necesito ser perfecta para sentirme extraordinaria”, lo que lo convierte en una especie d rezo para encontrar “esa libertad que trasciende el deseo de perfección”.
Y, contrario a “querer fama y solo fama”, Pamela indicó que ser artista es su oficio, no “una magia de inspiración divina” y que prefiere cantar en teatros pequeños para “estar cercana a la gente”.
“Mis conciertos son como entrar a la casa de tu amiga que está un poco loca y te dice ‘escucha lo que acabo de componer'”.
La artista explicó que se divierte en los conciertos pequeños, porque logra sacarle al público un poco de locura y terminar bailando en el escenario con “cercanía” y “libertad” para disfrutar todos de esos momentos “sensibles, espontáneos y muy vivos”.