¿Lista para llevar flequillo?

Michelle Obama ha hecho que muchas quieran copiarlo. Le enseñamos cuál es el mejor estilo de acuerdo a la forma de su rostro

Nueva York — Aunque recordamos a personajes tan antiguos como Cleopatra mostrarlo con orgullo, y realmente nunca ha pasado de moda, basta con que una figura de la talla de Michelle Obama decida llevarlo para que muchas mujeres se atrevan a cortarse de nuevo, o por primera vez, el famoso flequillo.

El nuevo look de la esposa del Presidente ha sido el tema de conversación de la prensa, expertos de moda y personas en general, que bien sea para criticarla o alagarla, no pudieron dejar pasar de largo que justo después de cumplir sus 49 años, la Primera Dama haya decidido adoptar este estilo generalmente juvenil.

“A mí me pareció excepcional. Hace que sus seguidores cambien la perspectiva de lo que es una primera dama, la creencia de que ellas tienen que llevar un look señorial, que no son atrevidas. El flequillo le ha dado un toque juvenil, hace que nos sintamos más cerca de ella”, opina Marcos Carrasquillo, embajador de L’Oreal Paris.

“Yo no comparto la idea de que las mujeres de cierta edad no deberían llevar flequillo. Mi filosofía es que el corte de cabello tiene que ir con el tipo de cara de la persona y con el estilo de vida”, agrega Robert Santana, Educador Artístico de Matrix, quien asegura que el cambio de corte de la señora Obama le sienta muy bien. “Me fascinó verla. Es un cambio no tan radical, que le creó un cierto dinamismo a su rostro, la hace ver más joven”.

Entonces parece que el flequillo, pollina, cerquillo o capul, dependiendo del país de Latinoamérica de donde se hable, va a hacer su aparición en los rostros de muchas mujeres. Corto, largo, grueso, fino, de lado o recto, cualquiera sea el estilo, seguramente regresó para quedarse, por lo que es importante saber unas cuantas cosas antes de dar ese “arriesgado” paso.

En términos generales, agrega Carrasquillo, hay cinco tipos de flequillo: el recto, que es el más tradicional; el asimétrico; el tipo cortina, que va de menor a mayor, de lado, y puede ir de derecha o izquierda o viceversa; el abierto, que se abre en el medio y es cuadrado y un poco desgrafilado; y el ligeramente cortado, que es un poco más redondeado.

“El de Michelle Obama es un flequillo bastante recto, que ha estado de moda por mucho tiempo y se puede llevar con el cabello largo o con el cabello corto. Se utiliza justo encima de la ceja, para que de un look romántico”, explica el estilista de L’Oreal.

Pero antes de escoger el tipo deseado, hay que tomar en cuenta varios elementos para no cometer errores del cual haya que arrepentirse.

El tipo y grosor del cabello: para el cabello fino lo más recomendable es cortar un flequillo igualmente fino y con una terminación recta; y para el grueso puedes cortarlo con una terminación recta si prefieres un estilo clásico, o irregular para darle un efecto moderno.

Si el cabello es seco, debería ser largo y de lado; y si es más bien grasoso, el flequillo también debe cortarse de lado, evitando el excesivo contacto con el rostro, ya que esto puede ocasionar más grasa en el mismo.

El pelo lacio es el ideal para cualquier tipo de pollina. Dependiendo de la forma de la frente, ojos y cabello, puede elegir entre los estilos de flequillo largo, desgrafilado y recto.

Mientras que si el cabello es ondulado, un flequillo escaso, largo y de lado, le puede aportar personalidad a su rostro. Pero si los rizos son muy cerrados es mejor evitar el flequillo, al menos que quiera llevarlo alisado.

“Si vas a llevar una pollina tienes que cambiar la onda del pelo. Cuando la cabellera es muy riza, el cabello debe ser cortado en muchas capas, con volumen, para que se vea un rizo muy armado”, acota Carrasquillo.

Pero no hay cosa más importante que tomar en cuenta, a la hora de cortarse el flequillo, que la forma de la cara.

“Primero que todo hay que analizar el tipo de rostro. Este es un cambio de look agresivo, por lo que hay que evaluar y consultar con el estilista”, señala Carrasquillo. “Yo le recomiendo a mis clientas que vayan de manera progresiva, que comiencen con el flequillo de lado, que se acostumbren y aprendan a manejarlo. Luego pueden hacer uno redondeado y después intentar el cuadrado.

“Muchas no conocen bien su tipo de cara, y se cortan la pollina muy corta”, asegura Santana.

Los tipos de cara básicos, y el flequillo adecuado para cada tipo según ambos expertos, son los siguientes:

Cara de corazón: se caracteriza por una frente amplia, pómulos prominentes y una barbilla en “v”. “La pollina se puede llevar como la de Michelle, bastante recta, bastante marcada, porque es una cara, como la ovalada, que es ideal para las pollinas”, dice Carrasquillo.

Cara triangular: aunque se puede confundir con la cara de corazón, la cara triangular tiene un mentón más ancho y fuerte, con ángulos más rectos. El flequillo desgrafilado es el mejor. Lo puede usar a un lado o al medio.

Puede llevarlo marcado, según Santana, pero dependiendo de sus mejillas, si no son muy altas y si el diámetro entre las mejillas y la frente no es muy estrecho.

Cara redonda: es un rostro ancho de marcados cachetes. Porque las pollinas ensanchan la cara, se le recomienda mantenerse alejada de ellas. Si se atreve, se sugiere un flequillo asimétrico, largo de un lado.

“No recomiendo algo muy recto, preferiblemente se aconseja llevar la pollina texturizada y más larga”, dice Santana.

Cara cuadrada: es la cara más definida de todas pues tiene una mandíbula pronunciada y una barbilla pequeña. Puede usar el flequillo curvado u ondulado. Le ayuda a acentuar los pómulos. Tanto para cabellos lisos como para cabellos ondulados.

“Si la lleva muy recta le hace la cara más ancha. Le recomiendo crear más altura en la coronilla, cortando una pollina larga en el frente, hacia la parte más alta de las mejillas”, explica Santana.

Cara ovalada:los rostros ovalados se identifican por ser ligeramente más anchos en las mejillas y un poco más estrechos hacia el mentón. Le van los flequillos rectos, sean de pelo largo o corto. Un flequillo más sutil, desgrafilado, hecho con tijera o navaja. Mucho más marcado, recto o alineado. “Es un tipo de cara perfecto para cualquier tipo de pollina”, dice Santana.

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