Un buen día para el grado del ‘Canelo’

La noche en la que se graduó “Canelo”, debería ser el título de una crónica futura para recordar un día en el que el azafranado noqueador jalisciense dejó atrás sus fantasmas y puso punto a parte a su leyenda de ser un coleccionista de victorias fáciles.

Hoy, frente a Austin Trout, el “Canelo” Álvarez tiene la mejor oportunidad de su carrera.

Es, como tantas veces, la ocasión en la que se cruzan la pelea más peligrosa con la más importante.

Es una especie de emboscada en la que en cualquier curva del camino aparece un enemigo con ganas de arrancarte la cabeza.

Eso es Trout. Un rival de cuidado. De máximo respeto. Un peleador joven, entero y, como “Canelo”, también lleno de ilusiones legítimas por meterse en lo más alto para tocar de cerca el cielo y sus estrellas.

Buen día para el grado del “Canelo” Álvarez, solo que antes de graduarse, primero hay que aprobar ciertos exámenes.

El primero y vital, el examen de la presión, que va a aparecer en un hombre que sabe que se enfrenta al mejor rival con el que se ha cruzado en su carrera.

Presión, porque todo México, siempre en busca de nuevos mitos, lo mira y le exige, sí o sí una gran victoria.

Eso lo sabe Trout, invicto como el mexicano, y quien tiene en su mochila una victoria en el gallinero de Miguel Cotto y eso le da valor agregado como rival para cualquiera.

Si el “Canelo” supera la presión va a poner en el ring lo que tiene como boxeador. Va a poder desplegar todo su potencial de peleador con aguante y pegada para resolverlo todo a su favor.

No será facil y de hecho es una pelea, en lo previo, sin favoritos.

Trout le aguantó lo mejor que llevó Cotto y mientras se dio tiempo para meter sus manos rápidas y dañinas, marcar puntos, ganar asaltos y luego el combate.

No es un noqueador, pero es un boxeador que somete a sus rivales a un ritmo endiablado. Los ahoga de a poco y los castiga, aunque no se le conozca poder de noqueador en su carrera profesional.

Zurdo con buena mandíbula y pasos laterales oportunos.

Ese es el examen de “Canelo” Álvarez en la noche en la que quiere graduarse de gran figura, frente a un rival de valía.

“Contra el zurdo el upper”, nos decía el legendario Bert Sugar, alguna vez.

Y esa es la primera respuesta que necesita poner el práctica “Canelo”.

Es la forma de mantener fuera a Trout. Con su recto tendido y la combinación que cierra con upper lo va mantern a distancia. Lo demás es lo que de el marco escénico.

En lo previo se ven parejos.

A Chávez Jr. le llegó su noche consagratoria ante “Maravilla” Martínez y no pudo con el argentino.

A “Canelo”, la noche texana de San Antonio le ofrece una linda oportunidad que tendría que aprovechar para graduarse de estrella y ponerle luces propias a las carteleras grandes de Las Vegas, Nevada.

El futuro es hoy.

VIA TWITTER: ¿Es verdad que viene Juan Manuel Márquez contra Tim Bradley y si pelean quién cree usted que gana?

RESPUESTA: La pelea está a punto de cerrarse y sería en Las Vegas, pero no se hagan muchas ilusiones porque un choque entre un peleador defensivo como Bradley y un contragolpista como Márquez puede llevar muy poca adrenalina al cuadrilátero.

Márquez brilla si lo atacan, pero cuando él debe ir a buscar, es un peleador muy distinto.

Interesante de todos modos, ver cara a cara a los dos hombres que pusieron por la calle de la amargura al gran Manny Pacquiao.

Creo que gana Márquez, pero será un pleito enredado y sin brillo.

FRENÓ A NONITO: A los que no creíamos en sus posibilidades, Guillermo “Chacal” Rigondeaux, nos dejó callados con su victoria concluyente sobre el publicitado y carismático noqueador Nonito Donaire.

El olímpico cubano dio un recital de recursos técnicos y sabiduría para caminar el cuadrilátero y, mejor que eso, dejó al descubierto a Donaire, quien lució como un peleador de un solo golpe (su gancho de izquierda), que no sabe caminar hacia atrás, que entregó muy poco boxeo en su noche crucial y resignó su corona sin jugarse a fondo. La derrota de Donaire lo baja de la nube y baraja todo de nuevo en la zona de 122 y 126 libras.

MISTER GARCÍA: Tremendo tipo y gran señor Robert García, el padre de Mickey y entrenador de Nonito Donaire y “Bam Bam” Ríos, pero las dos derrotas que han padecido sus dos pupilos lo han dejado al descubierto.

García fue superado en el plano estratégico por la esquina de Alvarado, la noche del Mandalay Bay cuando Alvarado dominó a Ríos y en el Radio City Music Hall, Rigondeaux, repasó en cada metro de lona a Nonito y otra vez García no tuvo cómo cambiarle el recorrido al combate.

Ambos, Donaire y “Bam Bam” Ríos, perdieron jugándose de la misma manera: apostando toda la noche por un golpe ganador que aniquilara al rival y que no llegó. En ambas derrotas la esquina a cargo de García no tuvo respuestas.

Luego la seguimos.