Rick Scott veta ley para otorgar licencias de conducir a indocumentados
El gobernador Rick Scott dejó sin efecto un proyecto, conocido como "Dream Act Driver License", aprobado casi de forma unánime por el congreso de Florida
Miami – El gobernador de Florida, Rick Scott, vetó un proyecto de ley aprobado por la Cámara de Representantes del estado que otorgaba licencias de conducir a inmigrantes indocumentados, una medida que ha sido hoy duramente criticada por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU).
El gobernador republicano vetó el proyecto de ley conocido como “Dream Act Driver License”, aprobado casi de forma unánime por el congreso de Florida, que domina su propio partido, y que permitía a los sin papeles que entraron en EE.UU. antes de cumplir los 16 años obtener la licencia de conducir.
En un comunicado difundido hoy, Scott apunta que su veto al proyecto de ley obedece a que el Legislativo “no debería haber tomado la decisión de acelerar el proceso para obtener una licencia de conducir sobre la base de una política de gobierno federal adoptada sin fundamento legal”.
“El debate continúa en Washington para determinar qué principios deben definir las leyes de inmigración de nuestro país en el futuro”, apuntó Scott, quien precisó que el programa de Acción Diferida “no da derechos sustantivos o estatus legal a una persona y no crea una vía para la ciudadanía ni se extiende a familiares” de los beneficiados.
Los estudiantes indocumentados, incluyendo los que están detenidos o en proceso de deportación, pueden pedir la acción diferida si tenían menos de 31 años de edad cuando se anunció la medida, entraron a EE.UU. con menos de 16 años de edad, tienen cinco años residiendo consecutivamente en el país y no poseen antecedentes penales.
El director ejecutivo de la Unión de Libertades Civiles (ACLU) en Florida, Howard Simon, criticó duramente al gobernador del estado por “politizar un tema controvertido aprobado por la Legislatura con apoyo casi unánime”, en momentos en que “la mayoría de los estadounidenses apoyan una reforma migratoria de sentido común”.
“El veto del gobernador Scott es un retroceso” en los intentos de subsanar un “sistema migratorio fallido”, ya que cierra el paso a los “jóvenes que han crecido en nuestras comunidades y a las personas que aspiran a ser ciudadanos”, destacó Simon en un comunicado.
En opinión de Simon, es importante que los “soñadores” que se vean afectados por la decisión del gobernador de Florida sepan que, aunque el proyecto de ley fue vetado, “podrán conseguir una licencia de conducir bajo la ley estatal vigente del Departamento de Vehículos y Seguridad de Carreteras (DMV) de Florida”.
La política implementada por el DMV de Florida permite proporcionar “licencias de conducir provisionales” a los jóvenes que califiquen para la acción diferida, “si tienen autorización de empleo por parte del gobierno federal”, explicó.
La ACLU remitió hoy una carta al DMV de Florida en la que explica que el veto de Scott emitido este martes “no debería tener impacto en la política” desarrollada por este organismo.
“El gobierno federal ha reconocido que estos jóvenes están legalmente autorizados para trabajar y contribuir a nuestra economía”, por lo que el veto del gobernador Scott “no tiene sentido”, es solo un “intento de hacer más difícil para los soñadores conducir (un vehículo) para dirigirse a sus trabajos”.