Abuela de menor atropellada en Manhattan sale del hospital

NUEVA YORK — En medio de sollozos, ayer salió del hospital la abuela que junto a su nieta —fallecida por las heridas recibidas— fueron atropelladas a principios de mes por un adolescente que manejaba por el Alto Manhattan huyendo de la Policía.

“Estoy destrozada”, fue lo único que alcanzó a pronunciar Katia Gutiérrez, de 54 años, mientras salía del hospital San Lucas —en una camilla para ser trasladada en ambulancia a su casa— antes de romper en sollozos tratando de taparse la cara con un velo blanco que le cubría la cabeza.

Gutiérrez sufrió fractura de espalda y de una de sus piernas.

La mujer fue atropellada en la mañana del 4 de junio pasado —en las inmediaciones de la avenida Amsterdam y la calle 97, mientras llevaba a la escuela a su pequeña nieta Ariel Russo, de cuatro años— por un automóvil conducido por Frankie Reyes, de 17 años, que enfrenta cargos por homicidio vehicular y que se encuentra en la cárcel.

Según las autoridades, las dos mujeres fueron atropelladas por el joven de 17 años mientras éste —presuntamente— huía de la Policía conduciendo el vehículo de sus padres, sin autorización y sólo provisto de un permiso de aprender a manejar.

Alan Russo —padre de la menor— indicó que su suegra ha mejorado físicamente, sin embargo, aclaró que “aún falta lo peor, porque será la primera vez que llegue a la casa y todavía no sabemos cómo se va a sentir”.

Russo aclaró además que Gutiérrez no recuerda nada de lo sucedido. “Ella no recuerda exactamente lo que ocurrió, y en cuanto a su estado físico, los médicos le han dicho que tiene que someterse a rehabilitación”.

La familia demandó a la ciudad por la suma de $40 millones, citando las deficiencias del servicio de emergencia 911 en llegar a la escena del accidente.