Fiscales en EEUU preparan juicio a narcos mexicanos
Los fiscales federales de Nueva Hampshire se alistan para iniciar el juicio contra tres hombres mexicanos vinculados al cártel de Sinaloa
CONCORD, Nueva Hampshire.— Fiscales federales de Nueva Hampshire se preparan para enjuiciar a tres hombres vinculados al Cártel de Sinaloa bajo cargos de confabularse para distribuir mil kilogramos de cocaína en un caso que abarca el mundo entero.
Manuel Jesús Gutiérrez Guzmán, Rafael Humberto Celaya Valenzuela y Samuel Zazueta Valenzuela fueron arrestados hace 13 meses en el puerto de Algeciras, España. Los fiscales afirman que son miembros del tristemente famoso Cártel de Sinaloa, de México.
Zazueta Valenzuela impugnó su extradición y debe presentarse el martes ante el Tribunal Federal de Distrito de Concord después de llegar de España el fin de semana.
Jesús Soto, un cuarto acusado arrestado en territorio español, será enjuiciado por separado.
El juez federal de distrito Joseph LaPlante programó tentativamente el comienzo del juicio para principios de diciembre después de escuchar argumentos la semana pasada de los abogados de Guzmán y Celaya Valenzuela en el sentido de que los casos deben ser juzgados por separado. LaPlante se mostró renuente a separar los casos.
Los otros tres acusados en el encausamiento están prófugos, entre ellos Joaquín Guzmán Loera —conocido como “El Chapo”_, el líder del Cártel de Sinaloa.
Según las autoridades, desde que escapó de prisión en 2001 Guzmán Loera ha dirigido la organización criminal desde varios refugios y casas de seguridad en todo México, donde ha recibido ingresos por miles de millones de dólares con el tráfico de toneladas de cocaína y otras drogas a Estados Unidos. Ha sido encausado en varios estados además de Nueva Hampshire.
“Se cree que está en algún lugar montañoso de México”, dijo la semana pasada Donald Feith, fiscal federal adjunto. “Todos lo están buscando”.
Gutiérrez Guzmán es primo del jefe del cártel y durante numerosas reuniones con agentes encubiertos a lo largo de una pesquisa de dos años se mostró como representante directo de su primo, afirman los investigadores.
Las autoridades dijeron que la indagación comenzó en 2009 cuando se descubrió un vínculo con el cártel en Massachusetts. Agentes encubiertos del FBI se hicieron pasar por miembros de una organización europea de narcotráfico y tuvieron varias reuniones con los cuatro hombres en España, México y Estados Unidos.