Blatter dice que no es un parásito
LONDRES/AP El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, defendió su integridad en un discurso ante estudiantes, diciendo que él no es “un parásito despiadado que está chupando la vida” del fútbol y diciendo que es víctima de críticos que quisieran que no hubiese nacido.
Con la FIFA aún tratando de restaurar su reputación luego de una serie de escándalos de corrupción, Blatter aprovechó un discurso en la Universidad de Oxford para decir que se ha vuelto el “chivo expiatorio” de los problemas del fútbol.
El dirigente suizo de 77 años trató además de disipar insinuaciones de que él planea desde “una guarida de villano al estilo de James Bond” cómo sacarle jugo a las Copas del Mundo para después “ir riendo hacia el banco”.
La FIFA entregó una copia del discurso que Blatter pronunció en una cámara de debates en Oxford el viernes, pues la prensa no tuvo acceso al evento. Algunas de las críticas más duras contra Blatter han provenido de Inglaterra.
La reputación de la FIFA ha sido devastada en los últimos tres años por escándalos de corrupción muchos descubiertos por periodistas británicos que han provocado la salida forzada de varios miembros del comité ejecutivo, y luego de dos muy criticadas votaciones sobre sedes de la Copa del Mundo. Un panel de ética continúa examinando el proceso que llevó al otorgamiento de la sede del 2018 a Rusia y el torneo del 2022 a Qatar.
Blatter rechazó que haya malos manejos financieros, como se acusó luego de la asignación de las sedes a Rusia y Qatar. “Contrario a lo que pudieran haber oído, la FIFA no pide a los países organizadores que entreguen maletas llenas de dinero”, indicó. “No pedimos millones de dólares en recursos públicos para después enterrarlos en los Alpes”.
“Te preguntas a ti mismo ¿qué he hecho?, ¿cómo llegué hasta aquí?”, dijo Blatter. “¿Es la FIFA culpable de todo? ¿No somos una organización que busca lo mejor para el fútbol? ¿Por qué estamos así?”
“A la gente le gustan los chivos expiatorios, por supuesto, ¿pero por qué se han torcido tanto las cosas? Como pueden ver, no soy un bravucón autoritario que puede intimidar a sus críticos con una mirada y manejar a los gobierno a mi antojo. Soy un servidor del fútbol, no un dictador”, continuó.Blatter dijo que es un ejecutivo atormentado por la crítica de los medios. “Necesitarías tener un corazón de piedra para no sufrir”, señaló.Blatter vino a Londres para asistir anoche a la cena por el aniversario 150 de la Asociación de Fútbol Inglés.