Serena Williams, 18 veces “grande”
La estadounidense ganó su sexto US Open derrotando a Caroline Wozniacki 6-3, 6-3
Nueva York.- El pasado 1 de julio Serena Williams vivía uno de los episodios más oscuros de su carrera. Después de ocho saques horrorosos, abandonaba junto a su hermana Venus un partido de dobles en el tercer juego. Desorientada, con dificultades para caminar, cerraba así un pésimo Wimbledon. El torneo emitió al día siguiente un comunicado diciendo que Serena había abandonado por enfermedad, debido a un virus, algo que casi nadie se creyó.
Apenas dos meses después, la menor de las Williams completó un US Open de ensueño a sus 32 años. Sin ceder un solo set en dos semanas, ganó su tercera final consecutiva en Nueva York, su sexto US Open individual y su 18º título de Grand Slam, igualando así la marca de Chris Evert y Martina Navratilova, que se unieron a la fiesta para la entrega de trofeos. En el horizonte, los 22 grandes de Steffi Graf.
“El número 18 me pesaba sobre los hombros”, admitió Serena.
Su rival en la final, la danesa Caroline Wozniacki, poco pudo hacer ante la potencia de Williams, pese a jugar un buen partido desde el fondo de la pista. Serena la hizo correr de esquina a esquina con golpes profundos; Wozniacki, 24 años, devolvía con potencia, dando a lugar a largos intercambios aplaudidos por los más de 24 mil espectadores que llenaron el estadio Arthur Ashe.
“Enhorabuena Serena. Eres una campeona increíble y una amiga increíble. Me debes unos tragos más tarde”, le dijo Wozniacki a su rival tras el partido aún sobre la pista. La danesa -que fue nº 1 mundial en 2010 pero ha vivido desde entonces años difíciles- asegura que Williams la ha ayudado en la recuperación de su mejor tenis.
“Nos escribimos casi todos los días”, comentó Williams. “Caroline es una gran persona y una gran jugadora. Estoy segura de que volverá a ganar, así que tendré que volver pronto a casa y entrenar duro”.
Los dos sets fueron muy diferentes, pero con el mismo desenlace. En el primer parcial se sucedieron las roturas de saque, hasta cinco seguidas del segundo a sexto juegos, en una extraña sucesión en que ninguna encontraba su servicio.
“Creo que ambas comenzamos el partido un poco nerviosas”, dijo Wozniacki.
En cambio, en el segundo set, después de la rotura de saque en el juego inicial a favor de Williams, cada uno mantuvo su servicio hasta el juego final, en el que Serena volvió a romper el saque de Wozniacki para repetir el 6-3 del primer parcial. El partido duró 1 hora y 15 minutos.
Serena endereza así un año que venía siendo pobre en títulos importantes, con derrotas tempranas en Australia, Francia y Wimbledon. En este US Open no ha tenido que enfrentarse a ninguna jugadora del Top 10, pero tampoco hubiera sido problema, ya que ha ganado sus últimos 17 partidos ante jugadoras de ese grupo, ocho de ellos en 2014.
Al haber ganado las US Open Series (los torneos de verano que se juegan en Norteamérica antes del US Open), Serena se embolsa el mayor premio de la historia del tenis: $4 millones (tres por el US Open y un millón extra por las series). Ya el año pasado se había llevado $3.6 millones al completar la misma hazaña. Además, recibió una pulsera de oro de manos de Evert y Navratilova con el número “18” grabado, ese número que ahora comparten las tres leyendas.
“Ya no tengo que ganar otor título. Siempre tendré mi pulsera con el 18“, comentó Serena en rueda de prensa mirando la joya en su muñeca.
“Sus resultados y su carrera lo dicen todo. No se llega a 18 títulos de Grand Slam sin ser excepcional”, dijo Wozniacki en rueda de prensa. “Es una de las mejores de todos los tiempos. Cuando está haciendo su juego, no hay mucho que las demás podamos hacer“.
Williams coincidió: “Cuando estoy jugando mi mejor tenis, es difícil ganarme”.
Entre lágrimas, Serena Wiliams agradeció al público de Nueva York el apoyo: “Es increíble ganar aquí mi primer Grand Slam del año”.