Con mucho en juego, pero poca atención
La batalla principal es por el control del Senado

Los votantes tienen poco interés en los comicios. Crédito: <copyrite>Getty </copyrite><person>FOTO< / person>
Washington, D.C.
Las elecciones legislativas determinarán la reconfiguración de ambas cámaras del Congreso y el futuro rumbo de medidas como un aumento al salario mínimo o la reforma migratoria.
A tres semanas de los comicios del 4 de noviembre, los demócratas apuestan por mantener el control del Senado, clave para que el Presidente Barack Obama pueda llevar a cabo su plan de acción ejecutiva en el tema migratorio.
En la actualidad los demócratas tienen 53 escaños en el Senado y suelen contar en las votaciones con el apoyo de dos legisladores independientes, frente a los 45 que están en manos de los republicanos.
En los próximos comicios se renovarán 33 escaños y las proyecciones de la web política RealClearPolitics muestran que los republicanos tienen garantizados 46 en toda la Cámara, con 45 para los demócratas y nueve batallas muy reñidas en estados: Alaska, Arkansas, Colorado, Georgia, Iowa, Kansas, Louisiana, New Hampshire y Carolina del Norte.
Los expertos vaticinan que la Cámara Baja quedará en manos de los republicanos, por lo que la noticia principal en las urnas será el control del Senado.
En 2008 los demócratas consiguieron la mayoría en ambas cámaras, en 2010 perdieron el control de la Cámara de Representantes y mantuvieron el Senado, yen 2012 no acortaron las distancias.
En 2014 los resultados determinarán si hay avance o estancamiento en asuntos como la reforma migratoria, la reforma tributaria, un aumento al salario mínimo, el manejo de la deuda nacional, y la estrategia antiterrorista.
Salvo algunas excepciones, los comicios legislativos de cada dos años, llamados de “medio término”, no suelen generar mucha participación en las urnas.
Lo preocupante en 2014 para los demócratas es que las contiendas más reñidas se definirán por un pequeño porcentaje de votantes, y la escasa participación de su base podría darle una victoria a los republicanos.
En los cuatro últimos años, con un Senado bajo control demócrata y la cámara baja en manos de los republicanos, ha habido un “estancamiento” en el Congreso. Esa situación se prolongaría si se cumplen los pronósticos para estas elecciones