Obama propone mayores lazos con China
Presidente dice que Estados Unidos "ha ayudado a integrar a China"
El presidente Barack Obama subrayó el lunes que “EE.UU. quiere ver a una China al alza, próspera, pacífica y estable”, y añadió que, “aunque competimos por negocios, también cooperamos en una amplia gama de retos y oportunidades”.
Entre esos retos, citó la lucha contra el ébola, el cambio climático o la proliferación nuclear, según afirmó Obama en un discurso en un foro de líderes empresariales de la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que se celebra esta semana en la capital de la potencia asiática.
En un discurso de marcado carácter económico, Obama destacó que Estados Unidos “ha ayudado a integrar a China en la economía global, porque eso también va a favor de los intereses estadounidenses”.
Subrayando los recientes logros en la economía de EE.UU. (como el fuerte aumento de producción de gas y petróleo o el nivel de crecimiento de empleo -definió el 2014 como el mejor año desde la década de 1990-), un victorioso Obama dijo que “no debería haber ninguna duda en que Estados Unidos continúa comprometido con Asia”.
Así, expresó que su país continuará promocionando “la seguridad y el crecimiento económico” en la región Asia-Pacífico, para que éste sea “equilibrado, fuerte y sostenible”.
Acerca de las relaciones bilaterales con China, Obama recordó su encuentro con el presidente Xi Jinping en junio de 2013 en California, cuando el mandatario chino incidió en que “el océano Pacífico es suficientemente grande para ambas naciones”.
Casi un año y medio después, Obama suscribió las palabras de Xi y consideró que trabajar en conjunto con China “responde a los mejores intereses del mundo”.
“Si China y Estados Unidos pueden trabajar juntos, el mundo entero se beneficia”, argumentó.
En ese aspecto, Obama mostró su interés en continuar trabajando para alcanzar un “ambicioso tratado de inversión bilateral que abra la economía china a los inversores estadounidenses, y que traiga incluso más oportunidades a ambos países”.
Además, anunció que ha llegado a un acuerdo con China para relajar la política de visados, de forma que los permisos para turismo y negocios sean válidos por un periodo de 10 años y los de estudiantes por 5 años (frente a un solo año anteriormente).
Aunque de puntillas, el mandatario estadounidense también se refirió a algunas desavenencias que mantiene con China, en las áreas de comercio, inversión o los derechos humanos.
Obama indicó que su país observa “las acciones específicas que tome China para expandir el comercio y la inversión (…), y crear así un campo de juego más equilibrado en el que las políticas promocionen a los consumidores y no beneficien a una compañía sobre otras”.
“Esperamos que China se convierta en una economía innovadora que proteja los derechos de propiedad intelectual y rechace el ciberespionaje para beneficios comerciales”, añadió.
De forma breve y sin especificar, mencionó que también espera que el gigante “se levante a favor de los derechos humanos y la libertad de prensa”.
“No sugerimos estas cosas porque creemos que sean buenas para Estados Unidos, sino porque creemos que son buenas para un crecimiento sostenible y para la estabilidad de la región de Asia-Pacífico“, concluyó.