Editorial: El poder del odio racista

La masacre de afroamericanos en una iglesia del sur a manos de un joven, que supuestamente los mató en medio de acusaciones racistas, es un acto de terrorismo contra la sociedad estadounidense. Es un ataque cruel y cobarde por el sitio elegido, por la saña mostrada contra las víctimas congregadas y por el odio racial.

La Iglesia Emanuel AME en Charleston, Carolina del Sur, tiene una larga historia en la lucha por la igualdad de los afroamericanos. Desde su fundación en 1816 hasta hoy, sus líderes fueron ejecutados por organizar un fallido levantamiento de esclavos, fue incendiada y destruida por el racismo. Hoy el poder de ese mismo odio volvió a golpear sus puertas, matando al pastor y ocho personas más.

Es trágico que a casi 200 años de la creación de la iglesia todavía sea un centro de atención para el racismo. Esto no ocurre en un vacío sino que refleja el contexto actual de tensiones a lo largo del país, especialmente en el sur.

Fue en North Charleston en donde un policía blanco -que está preso porque un video captó el incidente- mató por la espalda a un afroamericano no hace mucho. Se estima que en Carolina del Sur hay 19 grupos de odio, incluyendo dos organizaciones del Ku Klux Klan, según el Southern Poverty Law Center. Uno de esos dos grupos distribuyó el año pasado bolsas de dulces para reclutar adeptos y suavizar su imagen. También en la legislatura estatal de Carolina del Sur flamea orgullosamente la bandera confederadam como si se añorará el pasado esclavista previo a la Guerra Civil. Esa misma bandera es la que tenía el sospechoso Dylann Roff en la licencia de su auto.

Demás está decir que la libertad conque se compra y se vende armas tiene una cuota de responsabilidad en cuanto a la facilidad de obtenerlas y de matar a mucha gente con rapidez. Se estima que desde 2006 han ocurrido 279 asesinatos en Estados Unidos donde hay por lo menos cuatro muertos…la solución no es más gente armada.

La Iglesia Emanuel AME en Charleston sobrevivió todos los ataques y sobrevivirá este. A lo largo del tiempo el poder de la justicia, el valor de sus integrantes, de la comunidad y de la conciliación racial la sacó adelante. Como en el pasado, el poder del odio racista no la derrotará.