¿Por qué se hinchan los pies en verano?
Algunas personas retienen agua en sus extremidades durante la temporada de calor. ¿Qué hacer y cómo se previene la molestia?
La hinchazón o inflamación de tobillos y pies es un problema común en los meses cálidos del verano. Se presenta en individuos de todas las edades —incluyendo a los niños—, pero es más común en mujeres, personas de edad avanzada y en quienes caminan o están de pie por largas horas. Se estima también que hasta el 75% de las mujeres embarazadas desarrollan la condición.
“La hinchazón, conocida medicamente como edema periférico, es el resultado de una acumulación de agua anormal en los tejidos y músculos de las extremidades inferiores [pies, piernas y tobillos] que, en ocasiones, se da también en las manos”, explica el doctor Rodrigo Mercado, especialista en Medicina Familiar en Kaiser Permanente Baldwin Park, California.
¿Por qué en el verano?
El calor veraniego hace que la inflamación empeore al causar que los vasos sanguíneos (de las arterias, venas y vasos capilares) se dilaten, lo que reduce la elasticidad de sus paredes y causa que la sangre fluya del corazón a las extremidades con lentitud, detalla el galeno.
Además, durante el verano es más común que la gente viaje (ya sea en avión, autobús o automóvil) y los pies se hinchan por la falta de movimiento y permanecer sentado en un espacio reducido sin estirar las piernas y los pies.
“Esto hace que el flujo sanguíneo de las piernas sea más lento y en el caso de viajar en avión, puede ser posible que el cambio de la presión sea otra razón que provoque la hinchazón”, especifica el doctor Mercado.
Una señal de alerta
Si la hinchazón de los pies perdura al concluir el calor del verano hay que ponerle mucha atención porque, en la mayoría de los casos, el edema es un síntoma de otra enfermedad.
“[El edema de los pies] lo vemos, por ejemplo, en personas que padecen problemas renales, diabetes o enfermedades del corazón”, acentúa el galeno. “Es muy común en personas que fuman, tienen una dieta alta en sodio, padecen de obesidad o sobrepeso o llevan un estilo de vida sedentario”.
La inflamación que se genera durante un viaje y no baja, debe ser vigilada, ya que en algunas personas se pueden formar coágulos de sangre que restringen el flujo sanguíneo. “Estos coágulos de sangre, conocidos médicamente como trombosis venosa profunda (TVP), pueden poner en peligro la vida de quienes los sufren si no son atendidos a tiempo”, alerta el profesional de la salud.
La hinchazón de los pies puede ser también señal de un efecto secundario de algún medicamento. Por lo general, este tipo de inflamación se puede tratar en casa siguiendo una serie de cuidados personales ?como por ejemplo, mantener las piernas a una altura superior al corazón o introducir los pies en agua tibia con sales de Epsom?, pero si la situación no mejora o más bien empeora, hay que visitar de inmediato al médico de cabecera para que investigue su causa.
Una peligrosa práctica
Algunas personas de habla hispana se autorrecetan diuréticos que traen de sus países de origen para bajar la inflamación de los pies, sin saber que pueden poner en peligro su salud.
“Aunque los diuréticos se utilizan para tratar varias enfermedades, es importante que los lectores sepan que también pueden ser perjudiciales a la salud si se abusa de ellos o toman de manera inadecuada”, asegura el doctor Mercado.
“Los diuréticos pueden extraer tanta agua de la sangre que pueden causar deshidratación. Además, no son capaces de extraer agua de los tejidos donde es retenido el exceso de agua, por eso antes de tomar cualquier medicamento hay que consultar con el médico”, concluye el galeno.
Medidas de prevención
Para evitar la inflamación de los pies, el doctor Rodrigo Mercado aconseja:
- Disminuir la ingesta de sal
- Hacer ejercicio regularmente para ayudar con la circulación. Se recomienda hacer por lo menos 30 minutos diariamente
- Evitar estar parado o sentado por largas horas
- Mantener un peso saludable
- De tomar medicamentos, preguntarle al doctor si pueden ser la causa de la inflamación
- Evitar el uso de ropa o zapatos apretados
- Al viajar, usar medias de compresión
Y para lidiar con la hinchazón
- Elevar las piernas por encima del nivel del corazón
- Beber agua. Esto puede diluir la sal en el organismo y reducir la hinchazón general
- Evitar bañarse con agua muy caliente
- Masajear el área afectada con movimientos suaves pero firmes
- Nadar. Con unas cuantas vueltas a la piscina se puede aumenta la circulación de la sangre y al mismo tiempo reducir la presión en los pies
- Remojar los pies (o todo el cuerpo) en sales de Epsom
- Si la hinchazón viene acompañada de otros síntomas, como falta de aire, dolor en el pecho o fiebre, hay que ponerse en contacto con el médico de inmediato