Declaran la guerra a Airbnb por poner en riesgo viviendas asequibles

Mercedes Lázaro vive en un apartamento de Hell’s Kitchen hace más de 10 años, y aunque de vez en cuando renta uno de sus cuartos a turistas que usan la página de la compañía Airbnb para conseguir sitios donde quedarse a menor costo que en un hotel, la colombiana no solo podría meterse en serios problemas, como ser desalojada por violar la ley, sino que de paso está contribuyendo en poner en riesgo miles de viviendas asequibles en la Gran Manzana.

Así lo dejó ver un reciente informe elaborado por las organizaciones defensoras de vivienda de la Gran Manzana: Housing Conservation Coordinator (HCC) y MFY Legal service, en el que aseguran que del total de 51,397 lugares que la firma Airbnb ofrece en Nueva York, el 55% son ilegales. Asimismo se determinó que el 30% de las unidades residenciales disponibles son controladas por grupos comerciales, no por simples inquilinos, quienes obtienen ingresos superiores a $317 millones.

“El reporte revela un claro patrón de los listados de Airbnb dominados por comerciales ilegales que están manipulando el mercado de alquileres residenciales al disminuir la disponibilidad de unidades de vivienda a largo plazo”, asegura el reporte, donde se acusa a Airbnb de estar enriqueciéndose a costa de quitarle opciones de vivienda a quienes las necesitan.

El informe asegura que en el 2015 hubo más de 8,000 viviendas manejadas por Airbnb, lo que redujo en 10% la oferta a neoyorquinos que están buscando lugares asequible donde vivir.

“Nueva York está experimentando una crisis de vivienda asequible jamás vista y las prácticas de Airbnb se están tragando las unidades asequibles que hay, forzando a los neoyorquinos a salir de sus casas y precipitando el aumento de desamparados, sin precedentes desde la Gran Depresión”, aseguró la defensora de pueblo, Letitia James.

Por su parte, Sarah Desmond, directora ejecutiva de la organización Housing Conservation Coordinators, aseguró que Airbnb está “reuniendo millones de dólares en nuestras comunidades a costa de los neoyorquinos del común”.

Peter Schottenfels, portavoz de Airbnb, no solo desestimó los resultados del informe sino que dijo que la verdadera intención detrás de ese reporte es proteger a la millonaria industria hotelera, negándole la oportunidad a personas de bajos recursos de poder tener alivios con mejores tarifas.

“Si todo el cabildeo de los hoteles que financió este estudio engañoso fuera realmente sobre la vivienda asequible, habrían instado a los políticos de Albany a actuar con soluciones reales, como reestablecer el programa de crédito fiscal 421. Pero en cambio ellos la emprenden contra la gente de clase media como su máxima prioridad”, dijo el representante de la compañía, fundada hace 8 años.

“Tenemos que trabajar juntos para encontrar soluciones que en realidad beneficien a los neoyorquinos de clase media, incluyendo la forma de proteger con responsabilidad a quienes prestan sus casas, en vez de proteger los intereses de la industria hotelera que está bien conectada”, dijo.

Cifras manejadas por Airbnb indican que gracias a que muchos neoyorquinos rentan sus espacios a turistas pueden tener ingresos extra para pagar sus obligaciones y poder permanecer en un hogar.

Un 23% de los inquilinos afirma que con el dinero que reciben se han salvado de ser desalojados o de tener que entregar las casas que están pagando. Y la compañía insiste en que el 72% de los lugares que se ofrecen para ser rentados bajo Airbnb pertenecen a personas de bajos y medianos ingresos y no a corporaciones, datos que contradice el reporte.

Según el informe, el 90% de los lugares ofrecidos por Airbnb están ubicados en Manhattan y Brooklyn, y el 65% de ellos están concentrados en cinco áreas: East Village/Lower East Side, Chelsea/Hell’s Kitchen, West Village/Greenwich/Soho, Bedford-Stuyvestant/Crown Heights y Williamsburg/Greenpoint.

La asambleísta estatal Linda Rosenthal advirtió que en Nueva York es ilegal alquilar espacios por menos de 30 días y dijo que presentó una iniciativa en la Legislatura para que sea ilegal promocionar y anunciar espacios ofrecidos como hoteles, como lo hace Airbnb. “Se trata de sentido común y juntos los vamos a detener”, dijo.

Yonatan Tadele, organizador comunitario del Lower East Side hizo un llamado a la gente para que no caiga en la trampa de rentar sus espacios a Airbnb, porque pueden terminar en líos legales y en la calle.

“Airbnb está llevando a los inquilinos a violar la ley, pero cuando los caseros los descubren y los llevan a la corte, ellos se lavan las manos y los dejan solos. Ellos no van a evitar que los desalojen y no van a reubicarlos a ustedes”, dijo. “Aquí no estamos hablando de dinero extra para la gente sino para las corporaciones. No podemos permitir que las residencias las usen como hoteles”.

DATOS

• Airbnb es una compañía de mercadeo de lugares que opera en 191 países, y cuenta con más de 1 millón 500 mil ofertas de apartamentos en todo el mundo.
• Fue fundada en el 2008 y su sede central está en San Francisco, California.
• El informe presentado asegura que en Nueva York Airbnb ofrece 51,397 lugares como hoteles.
• Se asegura que el 55% de los espacios ofrecidos son rentados de manera ilegal.
• El 30% de las unidades residenciales disponibles son controladas por grupos comerciales.
• El informe afirma que con los lugares rentados de manera ilegal, Airbnb tiene ingresos superiores a $317 millones.
• En la Gran Manzana hay más de 8,000 unidades de vivienda rentadas por Airbnb que aumentan la crisis de vivenda asequible.
• Se presume que más de la mitad de esas viviendas podrían otorgarse a personas de bajos y medianos recursos en programas de renta estabilizada.