La deportación de los veteranos

Este 8 de julio veteranos deportados irán a la zona fronteriza

Si estás muerto, te permiten volver. De hecho, te darán un funeral militar con plena ceremonia. Pero antes de eso quedas deportado, separado del país por el cual peleaste honorablemente, y separado de tu familia aquí.

Este es el mensaje que este gobierno ha transmitido a miles de veteranos. Cuando se inscribieron en las Fuerzas Armadas eran inmigrantes legales con residencia permanente.

Pelearon con honor en guerras desde Vietnam a Afganistán. Como otros veteranos regresaron a este país y tuvieron que bregar con retos muy duros, muchos de ellos con PTSD (desorden post traumático). Muchos se metieron en problemas y algunos fueron hallados culpables de delitos relacionados con la droga.

Ante los ojos de las autoridades migratorias, el hecho de que fueron hallados culpables significó que debían haber sido deportados y a todo vapor. Ya han deportado a 3,000 y nadie sabe cuántos están en vías de ser expulsados.

Un veterano deportado en Tijuana. Sandy Huffaker/Getty Images
Un veterano deportado en Tijuana. Sandy Huffaker/Getty Images

Si estos veteranos hubieran sido ciudadanos en vez de residentes legales permanentes, se les hubiera proporcionando apoyo social y nueva capacitación para el trabajo. Si hubiesen cometido delitos se les hubiera juzgado en cortes especiales para veteranos en las cuales se asigna más programas de rehabilitación que sentencias de cárcel.

Para los 3,000 y más veteranos deportados no ha habido ningún trato especial. Al ser hallados culpables de delitos, fueron deportados en forma inmediata.

Ahora los residentes permanentes legales que se inscriben en las fuerzas armadas reciben ayuda para convertirse en ciudadanos estadounidenses. Pero antes de este cambio de política, miles que fueron honorablemente desmovilizados de las Fuerzas Armadas han enfrentado la prohibición de regresar a la nación para la cual prestaron su servicio militar.

Veterans Panel & CGM Replica, NY (April 23, 2016)-2

Este 8 de julio, un grupo de estos veteranos deportados se presentarán juntos en el puesto de la frontera norteamericana en Tijuana. Pedirán a las autoridades fronterizas que los “dejan regresar a casa”. Integrantes de mi organización, la Familia Latina Unida, estarán ahí para saludarlos y apoyarlos, al igual que muchos miembros de sus familias.

Espero y rezo porque a estos hombres se les otorguen la libertad para convivir de nuevo con sus familias y amigos. Por favor, unan sus oraciones con las mías por estos soldados que intentan regresar a sus hogares y sus seres amados.

Exigimos que llamen, también, a sus senadores y representantes en la Cámara de Representantes, y al presidente, para pedirles que apoyen a estos luchadores que están recibiendo un trato tan ingrato. Si sirven para morir por esta nación, merecen poder vivir en esta nación

En esta nota

Ejército de EEUU Veteranos
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain