Bodegas que vendan K2 perderán licencias de alcohol y lotería
El gobernador Andrew Cuomo anunció nuevas medidas para combatir la comercialización de marihuana sintética
Nueva York quitará las licencias de alcohol y lotería a los negocios que estén vendiendo marihuana sintética y otras drogas de este tipo, advirtió este jueves el gobernador Andrew Cuomo.
El mandatario ordenó a las agencias a cargo de expedir los permisos para la venta de alcohol y lotería que estén más vigilantes y aumenten sus esfuerzos para revocar las licencias a los dueños de negocios que se descubra venden drogas sintéticas, conocidas también como K2.
El Gobernador anunció estas medidas más agresivas para combatir las drogas sintéticas, en la que habrá más aumento de policías para asegurar que los negocios cumplen con los requisitos de la ley que prohíben la manufactura venta y distribución de drogas sintéticas.
La Policía coordinará esfuerzos con la división de Narcóticos del Departamento de Salud del estado, como parte de las medidas anunciadas este jueves por el Gobernador en contra de la marihuana y otras drogas sintéticas.
El anuncio ocurre luego de que esta semana el uso de la marihuana sintética, conocida también como Spice, enviara 33 personas a un hospital en Brooklyn, tras lo cual la policía realizó redadas en cinco bodegas en ese condado por la alegada venta de la droga.
El pasado mayo, el Departamento de Salud de la ciudad y el alcalde Bill de Blasio habían anunciado una disminución de un 85% en las visitas a las salas de emergencia relacionadas con el consumo de estas drogas.
“La evolución de las drogas sintéticas es un alarmante riesgo a la salud pública pero estamos al frente en la batalla”, señaló Cuomo en un comunicado.
Mientras que el director de Salud del estado, Howard Zucker, calificó de “crisis” para la salud el resurgimiento del uso de la K2 y la directora de la Oficina de Servicios contra el Alcholismo y Abuso de Sustancias, Arlene González-Sánchez advirtió que pueden causar la muerte.
El año pasado, se registraron más de 6,000 visitas a las salas de urgencias por la marihuana sintética, en su mayoría hombres, que además causó dos muertes.