¿Y todavía no encuentras pareja?
Tips que te ayudarán a encarar las típicas preguntas de las reuniones de fin de año si aún estás soltera
Por tercer año consecutivo, Soledad González podrá disfrutar de las fiestas de fin de año en familia sin que sus seres queridos y amigos cercanos le hagan las típicas preguntas de, ¿todavía no encuentras pareja? o ¿es que nunca te piensas casar?
“Mis familiares y amigos me tenían chata con estas preguntas”, dice la mexicoamericana de 36 años de edad, quien reside en Sierra Madre (California), con tono de voz de hastío. “Ya hasta me aburría el tan solo pensar en las fiestas de fin de año porque sabía que me iban a hacer las mismas preguntas que empezaron a hacerme desde que pasé los 25 o 26, y todavía no tengo un compañero de vida fijo”.
Pero todo cambio hace dos años cuando su abuelita le dijo ante toda la familia: “bueno hija, sino tienes cuidado [de conseguir un novio fijo] se te va a ir el tren. Y Soledad le contestó: “no abuelita, no es que me haya descuidado, sino que perdí el propósito”.
A sorpresa de la comunicadora de profesión, la abuelita se largo a reír y le dijo: “tienes razón hija, hoy día es difícil conseguir a alguien bueno”.
“A partir de allí ya nadie me volvió a preguntar nada, porque no es que no haya tenido relaciones amorosas, el problema que he tenido es aguantarlos”, resume Soledad, dejando soltar una gran carcajada.
Y es que como dice la psicoterapeuta Anabel Castrezana, vinculada a Kaiser Permanente en Santa Ana (California), en esta sociedad moderna estas preguntas siempre surgirán en las reuniones familiares ante el gran número de hombres y mujeres mayores de 25 años que se encuentran solos o sin una pareja formal.
¿Cómo encarar este tipo de preguntas sin permitir que quebrante nuestro estado emocional?
Castrezana responde: “el secreto está en prepararse mentalmente para encarar la pregunta con dominio total de uno mismo y sin ningún tipo de disgusto o agresión”.
De esta manera, la pregunta no cae de sorpresa y menos las personas que insisten en obtener una respuesta. “Cuando estás preparada, estás lista para contestar como, ‘porque todavía la persona correcta no ha llegado a mi vida’ o ‘porque es mejor estar sola que mal acompañada’”.
Nada personal
Al estar preparada se evita tomar la pregunta de manera personal, que es lo que provoca sentimientos de molestia, disgusto, rareza o desolación.
Y es que uno de los principios de la felicidad es no tomarse las cosas de forma personal. Lo mejor es que cada quien estén en sus propios rollos y una con los suyos.
“Cuando este tipo de preguntas se toman a pecho, no nos enfocamos en las cosas positivas de las fiestas”, denota Castrezana. “Por eso, es mejor ir preparada y contestar lo que se debe contestar”.
De ponerse el ambiente pesado con la misma pregunta, la psicoterapeuta recomienda no contestar de manera pesada o agresiva, sino cambiar el tema o simplemente sacar una disculpa para dejar la fiesta.
No hay que evadir la fiesta
El evadir la fiesta para no encarar la pregunta no es saludable.
“La evasión es lo peor que se puede hacer”, dice la experta en comportamiento humano. “Eso demuestra inseguridad y susceptibilidad. Una tiene que estar consciente de su situación de soltera y sentirse cómoda con ésta”.
Una invitación a otra fiesta de Navidad o Año Nuevo con un grupo de amigos nuevos donde no todos se conocen y habrá muchos solteros, Castrezana dice que sería la única excusa para no asistir a la fiesta familiar.
“En este caso no sería evasión a las preguntas, sino darse la oportunidad de conocer a alguien que potencialmente podría ser nuestra alma gemela. Hoy vivimos en una sociedad donde esa vieja expresión de que ‘te va a dejar el tren’, si es que estas entre los 25 o 30 años y no te has casado, no cuenta ya que la mujer prefiere prepararse académicamente y viajar antes de tomar el serio paso de las nupcias con la persona correcta”, concluye la psicoterapeuta.