Carne podrida, sanitarios con moho y teléfonos sin función: así viven inmigrantes detenidos en Orange
Una organización vigilante reporta que estos problemas han estado presentes durante los últimos años; ICE sostiene que se han corregido
El inspector general del Departamento de Seguridad Interna encontró que los inmigrantes detenidos en las instalaciones Theo Lacy de la ciudad de Orange sufren una amplia gama de problemas de salud y seguridad.
Durante una visita sorpresiva en noviembre, los inspectores federales descubrieron que a los detenidos se les servía comida echada a perder, se bañaban en regaderas llenas de moho y usaban teléfonos rotos con problemas de volumen.
También hallaron que los inmigrantes con crímenes menores o sin récord criminal eran encarcelados junto a detenidos con serios historiales delictivos en celdas de baja seguridad, lo cual viola los estándares de detención migratoria.
Se detectó asimismo que aquellos inmigrantes confinados en solitario por violar las reglas de la cárcel eran dejados por periodos de 24 horas sin acceso a visitas, ni ningún tipo de esparcimiento, lo que viola las políticas de la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
El reporte concluyó que ICE no da seguimiento a las quejas de los detenidos y no hace nada para asegurar que sean resueltas.
Tampoco tienen acceso a la base de datos de reclamos y quejas de los detenidos, de las cuales se encarga un contratista privado.
Las instalaciones Theo Lacy son operados por el Departamento del Sheriff del condado de Orange. Actualmente, hay 528 inmigrantes bajo custodia en esta cárcel.
En un comunicado, ICE aseguró que el problema de las regaderas se resolvió, así como los problemas de alimentación y mal estado de los teléfonos.
Mencionan que se reunieron con los supervisores carcelarios para instruirlos acerca de cómo documentar y atender apropiadamente las quejas de los detenidos.
A su vez, el Departamento del Sheriff del condado de Orange dio a conocer que todas las quejas presentadas en el reporte han sido atendidas y que están comprometidos con la salud y seguridad de todos los inmigrantes detenidos en las instalaciones Theo Lacy y James A. Musick, las cuales están bajo contrato de ICE.
La Red de Vigilancia de la Detención (Detention Watch Network), una organización no lucrativa que vigila las condiciones de las instalaciones carcelarias de migración, reportó que algunos de los mismos problemas encontrados en Theo Lacy se presentaron en 2012. En un seguimiento hecho en 2013, el grupo denunció que muchas de las irregularidades no se habían resuelto, a pesar de las declaraciones de ICE.
Hostilidades a diario
Carlos Perea, de la organización Resilience Orange County, dijo que las anomalías documentadas en el reporte han ocurrido por años. “Nuestra comunidad inmigrante ha sido tratada como animales y han sido víctimas de abusos inhumanos”, señaló.
Criticó que la mayoría de los condados en California han terminado sus contratos con ICE bajo el programa 287 (g) pero Orange, argumentando razones de seguridad, se ha negado. “El condado de Orange tiene dos contratos con ICE: uno para la custodia de los inmigrantes detenidos y otra para que los alguaciles actúen como agentes de migración dentro de sus cárceles”, explicó.
Añadió que el condado suplementa sus fondos generales con el dinero que recibe de ICE y por eso no quiere terminar el contrato, no por razones de seguridad pública.
Perea hizo ver que no sólo exigen que el condado termine los contratos con ICE, sino la renuncia de la sheriff Sandra Hutchens debido a que sus agentes siempre han mantenido una actitud hostil hacia los inmigrantes.