Cae “El Cenizo”, líder del grupo criminal “Los Caballeros Templarios”
Ignacio Rentería Andrade, considerado el sustituto de "La Tuta" era uno de los objetivos del gobierno federal
CIUDAD DE MÉXICO – Ignacio Rentería Andrade, “El Cenizo”, quien fuera lugarteniente de Los Caballeros Templarios en Uruapan y Apatzingán, fue detenido la madrugada de ayer después de una balacera entre militares y gatilleros en Parácuaro.
“El Cenizo” llegó a ser un delincuente del calibre de Servando Gómez, “La Tuta”, y otros operadores como Homero González Rodríguez, “El Gallito”, primo del capo Nazario Moreno, “El Chayo”, indicaron fuentes del Ejército.
De hecho, fue considerado por las autoridades estatales y federales como el sucesor “La Tuta”.
“El Cenizo” fue capturado junto con uno de sus principales operadores, a quien apodan “El Cabezas”.
Militares generaron información de inteligencia y detectaron a Rentería en la comunidad Primero de Septiembre, donde un grupo armado resguardaba al ex líder templario.
Los efectivos castrenses se desplegaron a esa zona, donde fueron atacados a tiros y repelieron la agresión.
En la refriega, que se prolongó por casi una hora, dos soldados quedaron lesionados.
Rentería resultó herido y fue canalizado en un helicóptero del Ejército a un nosocomio de la región, esto en medio de un dispositivo de seguridad. El estado de salud de “El Cenizo” es reportado como estable.
En mayo fue detenido uno de sus operadores identificado como “La Sema”.
En septiembre pasado grupos armados de “El Cenizo” derribaron un helicóptero del Gobierno de Michoacán que apoyaba un operativo para ubicar y detener a presuntos cabecillas del crimen organizado en la región de Tierra Caliente, entre ellos, a “El Cenizo” y su hermano Alonso, “El Papas”.
A Ignacio Rentería se le vincula con el asesinato, en 2015, del narcotraficante Carlos Rosales Mendoza, “El Tísico”, quien antes de ser abatido asistió a una cumbre de narcos en la región de Apatzingán.
Investigaciones ministeriales indican que al encuentro asistieron cabecillas de las autodefensas, del Cártel Jalisco Nueva Generación y de lo que quedaba de la estructura del grupo criminal Los Caballeros Templarios.