Trump roba protagonismo a jugadoras en torneo nacional de golf

El presidente hizo todo lo posible para convertirse en el "rey del campeonato"

Trump se valió de Twitter y de su "merchandising" para acaparar protagonismo en el torneo.

Trump se valió de Twitter y de su "merchandising" para acaparar protagonismo en el torneo. Crédito: Ian MacNicol/Getty Images

El Abierto Femenino de Golf de Estados Unidos atrae cada año el interés de miles aficionados de este deporte, pero en esta ocasión la atención del público se alejó de la competición en sí misma y se centró en uno de los personajes que más portadas ocupa hoy en día: Donald Trump.

Desde que se supo que dicho torneo tendría lugar en el campo de golf que el presidente posee en Bedminster, New Jersey, muchos dedujeron que el líder de la Casa Blanca intentaría convertirse en un “espectador destacado del campeonato, aunque lo que nadie imaginaba es que sería capaz de opacar los méritos deportivos de los participantes para tener su minuto de gloria.

El transcurso del torneo, además, ayudó a alimentar el ego presidencial, ya que, por primera vez en 50 años, una jugadora “amateur”, la coreana Hye-Jin Choi, estuvo a punto de ganar la competición con solo 17 años, lo que habría convertido al Club Nacional de Golf Trump en un lugar histórico.

La surcoreana Hye-Jin Choi estuvo a punto de imponer un récord histórico en el U.S. Women’s Open Championship celebrado en el Trump National Golf Club de Bedminster, Nueva Jersey. (Matt Sullivan/Getty Images)

El presidente no pudo ocultar su emoción y, consciente de que todo el mundo estaba pendiente de lo que sucedía en una de sus propiedades, decidió recurrir a su red social favorita, Twitter, para compartir su felicidad con sus seguidores.

Sin embargo, Choi no fue capaz mantener su ventaja respecto a sus rivales y, finalmente, una de sus compatriotas, la coreana Sung Hyun Park, de 34 años, le arrebató la victoria el pasado domingo y, al mismo tiempo, evitó que un hecho histórico tuviera lugar en una de las propiedades del imperio Trump.

De acuerdo a The Daily Beast, el afán de protagonismo del presidente no se limitó únicamente a Twitter, sino que su imagen inundó las instalaciones del torneo hasta el punto de que el logo de su marca sustituyó al clásico cocodrilo de Lacoste y fue impreso en prendas de ropa, perchas, carteles, bolsas y en otros muchos objetos y lugares.

Eso sí, los productos textiles que se pusieron a la venta en la tienda oficial de la competición no fueron fabricados en Estados Unidos, sino que, al igual que los diseños de Ivanka Trump, toda la producción se realizó en Bangladesh, India, lo que contradice el espíritu del “Make America Great Again” tan repetido en la campaña presidencial republicana de 2016.

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