Arrendar o comprar un auto nuevo: ¿Qué es mejor?
Una comparación entre las dos alternativas populares de financiamiento
A menudo, es difícil decidir entre comprar y arrendar [leasing] un auto nuevo. Por un lado, comprar un auto implica costos mensuales más elevados, pero a fin de cuentas, terminarás teniendo algo propio. Por otro lado, los arrendamientos conllevan cuotas mensuales más bajas, aunque te encontrarás metido en un ciclo en el que jamás terminas de pagar por el vehículo. A comparación de otros años recientes, ahora más personas optan por un contrato de arrendamiento que por un préstamo automotriz al comprar un coche. Y no parece que este auge del negocio de los arrendamientos vaya a cesar a corto plazo.
Un panorama en transformación
Para el típico consumidor, se han presentado una gama de tendencias convergentes que han cambiado el panorama de los arrendamientos. Desde las últimas décadas, una gran proporción de los autos de lujo tienden a ser rentados. Pero este fenómeno ha cambiado con la entrada de más autos compactos, sedanes convencionales, y SUV pequeños en el mercado de coches nuevos para arrendamiento. Gracias a los financiamientos con atractivas tasas de interés, puede haber ofertas muy buenas entre los arrendamientos.
Los fabricantes de automóviles se benefician arrendando una gran porción de los modelos que producen. Los arrendamientos ayudan a mantener un abasto regular de autos usados en el mercado, que por ende estimula los valores de su reventa. Los precios elevados de reventa disminuyen la depreciación de los vehículos, lo cual implica precios menores de arrendamiento para tales modelos. Así, el consumidor sale ganando.
Además, cuando los arrendatarios devuelven su coche a la conclusión de su contrato, estos clientes van al concesionario en persona para hacerlo. Ese momento es cuando la agencia automotriz aprovecha para ofrecerles un coche nuevo, cuando un cliente que se quedó sin coche va a necesitar otro muy pronto.
Las bajas tasas de interés que han perdurado en otras industrias en los últimos años ahora se ven en los contratos de arrendamiento, lo cual también ayuda a moderar su costo. Las tasas de interés son un componente primordial de la economía de los arrendamientos, porque a fin de cuentas, un arrendamiento es solo una forma más de financiar un auto.
Otra táctica que emplean algunos nuevos contratos de arrendamiento para estimular el valor de reventa de los coches se refleja en sus límites rígidos de millaje: de 10,000 millas por año, en vez de los límites tradicionales de entre 12,000 y 15,000 millas. Aunque esto quizás no presente un problema para aquellos que suelen manejar poco, los conductores generalmente tienden a exceder esa figura anual.
Asimismo, vemos un volumen creciente de contratos con plazos de menos de 36 meses, lo cual implica consecuencias positivas tanto como negativas. Vale destacar que será algo atractivo para alguien que prefiera no comprometerse a un contrato a largo plazo. Pero es en los 2 primeros años que los autos tienden a depreciarse más rápidamente, lo que produce un plazo de arrendamiento muy costoso.
No obstante, vemos con mayor regularidad en el mercado de los préstamos para auto que la gente ahora opta por extender el préstamo automotriz por 7 u 8 años, solo para mantener sus cuotas mensuales bajo control. En tales casos, quizás sí les convenga el arrendamiento a esas personas.
Qué diferencia hay entre los préstamos y los arrendamientos
A continuación, te presentamos algunas de las principales diferencias entre comprar y el arrendamiento.